Las recientes declaraciones del presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, a la cadena de noticias ABC, en las que advirtió a los padres de familia centroamericanos que no enviaran más a sus hijos ilegalmente a dicho país, tienen un mensaje claro y es que serán deportados, indicó Amílcar Vásquez de la Pastoral de Movilidad Humana.
jlopez@lahora.com.gt
Para Vásquez, las declaraciones de Obama reiteran lo que manifestó su Secretario de Seguridad anteriormente, en relación a que todos los niños serán deportados; además considera que es un llamado para que los menores no tengan que pasar por esto.
“Nuestro mensaje directo para las familias en Centroamérica es: No envíen a sus niños en trenes o a través de una banda de coyotes a la frontera”, afirmó Obama.
Según Vásquez también es una advertencia para que los niños no sean expuestos a ser víctimas del crimen organizado mientras viajan a los Estados Unidos.
“Enviarlos con un ‘coyote’ no asegura que los niños lleguen al país norteamericano, y de hacerlo, no asegura su estadía. El mensaje es claro”, opina Vásquez.
Por otro lado, ayer en la reunión de Jefes de Estado y de gobiernos de los países del Sistema de Integración Centroamericana, se expresó que es ineludible la responsabilidad de los países de tránsito y de destino garantizar la protección de los niños.
Asimismo, se declaró que la deportación no debe ser la primera acción a considerar si existen indicios que al retornar a sus países impide la reunificación familiar o pone en riesgo las vidas de los infantes.