Con la mejora de la seguridad en Haití, debido en gran parte a la vigilancia y operaciones para el reestablecimiento del orden que realizan los cascos azules de la ONU, las autoridades financieras invitan a los empresarios extranjeros a invertir en el país.
Para atraer ese capital que huyó de la inestabilidad política y la inseguridad en el país, una serie de beneficios arancelarios fueron lanzados para facilitar la instalación de empresas privadas en el mercado.
«Un Centro de Facilitación para la Inversión (CFI), una especie de tesorería única, fue creado para acoger a potenciales inversores y facilitar su inserción en el país», explicó Guy Lamothe, responsable del CFI, que depende del ministerio de Comercio e Industria.
«La creación de este departamento es una señal que enviamos a los inversores para decirles que Haití está pronto para acogerlos», precisó.
De su lado, la ONU subrayó su voluntad de reducir aún más la inseguridad en Haití.