Medio millón de escolares de primer grado de primaria de 15 mil escuelas públicas participarán del Tercer Censo de Talla, que se realizará esta semana en todo el país.
La medición se llevará a cabo del 4 al 8 de agosto, por maestros y maestras. Según autoridades educativas, se quiere identificar áreas geográficas de acuerdo con el indicador «talla», donde niños y niñas tengan mayor deterioro nutricional.
«El primer grado marca la diferencia en el resto del nivel educativo y la nutrición es decisiva para que los niños tengan mayor rendimiento escolar», dijo la viceministra de Diseño y Calidad Educativa, del Ministerio de Educación, María Ester Ortega.
Tercer censo
En el país se han efectuado dos censos que calcularon la talla de estudiantes del primer grado de nivel primario. En 1986 se hizo el primero, mientras que el segundo se registró en 2001.
De acuerdo con la información del último estudio, Guatemala es uno de los países con la más alta prevalencia de desnutrición crónica y donde el retardo en crecimiento llega hasta el 89%.
«El promedio nacional es alto comparado con el resto de países. Por ejemplo, Costa Rica tiene un 7% de prevalencia», señaló Patricia Palma, directora del Programa Regional de Seguridad Alimentaria y Nutricional para Centroamérica (Presanca).
El promedio actual de infantes menores de cinco años que sufren desnutrición, es de 49%; sin embargo, se reportan extremos como que en la capital llega a 13% esta dolencia, mientras que en algunas zonas de Huehuetenango se calcula hasta el 89%.
«La información es de suma importancia, pues permite hacer un diagnóstico de las condiciones de salud, alimentación y nutrición en las que los niños viven desde su concepción hasta el momento en que se efectúa la medición», refirió Ortega.
Pobreza y nutrición
La mayoría de niñez afectada por la desnutrición sobrevive en condiciones de pobreza, lo que genera que la dieta de la población guatemalteca sea poco variada e insuficiente para cubrir las necesidades nutricionales.
«La dieta fundamentalmente se basa en maíz, frijol y azúcar, por lo que no cubre todas las necesidades que el organismo tiene. Sumado a eso hay otros factores como las enfermedades y el ambiente que también afecta el crecimiento de los niños», argumentó Palma.
El ingreso de las familias y el costo de la canasta básica son dos factores esenciales que inciden en la nutrición de la población, ya que ambos impiden que las personas tengan menor acceso a los alimentos.