En una medida destinada a enfrentar los embotellamientos y reducir la contaminación en Estocolmo, los automovilistas de la capital sueca se verán obligados a pagar cada vez que entren o salgan del centro a partir del 1 de agosto.
El objetivo de la medida es reducir el tráfico en 2008 en entre un 10 y un 15% dentro y fuera de la ciudad, dijo a la AFP Birger Hoeoek, ejecutivo de la Administración Sueca de Caminos (Vaegverket).
Vaegverket es responsable del sistema de transporte vial en Suecia.
Los ingresos que genere el nuevo sistema de peajes serán utilizados para mejorar las rutas en el área de Estocolmo.
La capital sueca se unirá a otras ciudades como Londres y Roma, que ya introdujeron un mecanismo similar.
Desde el martes, los automovilistas deberán pagar entre 10 y 20 coronas (entre 1,09 y 2,17 euros o entre 1,49 y 2,98 dólares), dependiendo de la hora en la que circulen, con un límite de 60 coronas (6,51 euros u 8,94 dólares) por día.
Los vehículos que entren o salgan del centro de Estocolmo en los días laborales, entre las 06H30 y las 18H29, deberán pagar.
Los buses y los autos registrados en el extranjero serán eximidos. Además, los vehículos a electricidad y aquellos híbridos no pagarán hasta en 2012.
Las matrículas de los vehículos que entren o salgan de los límites de Estocolmo serán registradas por cámaras. Los automovilistas podrán pagar el peaje de forma automática a través de sus cuentas bancarias o bien cancelarlos en tiendas comerciales o por medio de internet.
El llamado impuesto a la congestión fue puesto en marcha de forma experimental en 2006 y superó las expectativas de lograr una reducción de un 10 o un 15% en la cantidad de vehículos que entraron o salieron de Estocolmo. La tasa se redujo en entre un 20 y un 25%.
Los habitantes de la capital sueca aprobaron la adopción del impuesto a la congestión en un referéndum efectuado en septiembre de 2006 y el parlamento dio la luz verde en junio.
Sin embargo, como los taxis no serán eximidos del peaje sus tarifas se incrementarán en un 5%.
Los tabloides suecos ya han publicado una lista de posibles trucos para evitar el pago de peajes.
No obstante, Hoeoek ya advirtió que las autoridades han considerado tales trucos y aseguró que las multas no ameritan el riesgo.
«La máxima sentencia es la prisión por dos años», aseveró.