El brasileño Felipe Massa (Ferrari) se tomó por fin su revancha ayer en el Gran Premio de Bahrein de Fórmula 1, al convertirse en el tercer vencedor en tres carreras disputadas de un Mundial-2007 que promete ser muy cerrado entre Ferrari y McLaren-Mercedes.
«Es genial. El resultado de las dos primeras carreras no se correspondió con lo que esperaba, pero este fin de semana todo salió perfecto», explicó. ’Pole’, mejor vuelta en carrera y victoria sin ceder la cabeza de carrera más que en boxes: «el fin de semana no pudo terminar mejor», decía con una gran sonrisa.
Esta victoria en el desierto de Bahréin le confirma en la lucha por el título, después de demostrar tras la marcha de Michael Schumacher que puede batirse por el título tanto como su nuevo compañero de escudería, Kimi Raikkonen.