De conformidad con lo establecido en el artículo 240 de la Constitución Política, toda erogación debe contar con su fuente de financiamiento y no obstante la contundencia de esta norma legal que no permite lugar a dudas, el proyecto del presupuesto general de ingresos y egresos de la Nación para el próximo año compromete millonarios recursos provenientes de préstamos sin que a la fecha el Congreso de la República los haya conocido, mucho menos aprobado.
El total de los préstamos por venir al Congreso de la República asciende a Q5,789.2 millones y como contrapartida el Ejecutivo proyecta emitir un total de endeudamiento interno por Q915 millones, lo cual equivale a decir que el presupuesto es altamente deficitario, como ha sido recurrente en los últimos años dado el enorme rezago social en diferentes áreas y que se refleja en los bajos índices de desarrollo humano que coloca a Guatemala como uno de los más atrasados de Latinoamérica.
El gobierno del presidente Colom y el partido oficial presentó un proyecto de presupuesto para el 2009 por más de Q49.7 mil millones, Q7 mil millones más comparado al presupuesto que recién amplió el Organismo Legislativo por Q1,400 millones, cuyo monto finalmente para este año ascendió a Q42.5 mil millones. Un préstamo con el BCIE por US$74 millones, aprobado el martes de la semana pasada financia en un alto porcentaje dicha ampliación presupuestaria.
Es el primer proyecto de presupuesto diseñado por la UNE
Este es el primer proyecto de presupuesto que diseña de acuerdo a su programa de trabajo el gobierno del presidente Colom y tal como lo ofreció en campaña tiene una fuerte asignación presupuestaria en materia social. De ahí que el Programa de Cohesión Social cuestionado por algunos bloques de oposición coordinará el manejo de más de Q2.8 mil millones y que para algunos observadores políticos es el vínculo más fuerte con la población de escasos recursos y una poderosa arma para fortalecer el partido oficial con miras a las próximas elecciones generales.
La primera dama de la Nación, Sandra Torres de Colom, sin precedentes en la política criolla de este país, se acercó a los doce bloques legislativos y aunque la discusión en el seno de la comisión de Finanzas no es miel sobre hojuelas, porque impuestos como el ISO (1%% sobre las ventas brutas) y la reforma fiscal no se vislumbran acuerdos, ella cabildea al más alto nivel para que los diputados voten a favor de la millonaria asignación presupuestaria para el tema social.
Déficit estimado es mayor 20.3%% comparado con el 2008
De acuerdo con las estimaciones del Ministerio de Finanzas, el déficit fiscal será equivalente al 1.7%% del PIB y es 20.3%% mayor comparado al gasto aprobado para este año, que se verá acompañado de un endeudamiento público neto del 1.5%% superior al del 2008 en 0.5%%. Del total del gasto 59.6%% se destinará a gastos de funcionamiento, de los cuales un 47%% corresponde a los presupuestos de los ministerios de Educación, Gobernación y Salud; el 26%% a inversión y el 13%% al pago de la deuda pública.
Para cubrir dicho déficit fiscal, la estrategia financiera del Estado se orienta a la obtención de desembolsos de préstamos por Q5.7 mil millones (ver gráfica No. 1) y si bien el Ejecutivo tiene estimado para el año entrante amortizar Q2,057.3 millones, el saldo de la deuda pública externa es de US$4,425.8 millones, para unos muy alta, para otros la más baja de América Latina que le permite a Guatemala continuar buscando fuentes de financiamiento de esta naturaleza (ver gráfica 2).
La comisión de Finanzas a la que le corresponde discutir el proyecto de presupuesto y emitir el dictamen correspondiente ha convocado ya a varias reuniones y no solamente para abordar este tema, sino también lo relativo a la reforma fiscal y al establecimiento del ISO, un impuesto denominado de Solidaridad, que el Ejecutivo pretende que sustituya al IETAAP, ya que éste concluye su vigencia el 31 de diciembre de este año y deja un enorme agujero financiero de más de Q2 mil millones.
Según se pudo constatar, los préstamos no contarán con mayor oposición, excepto del bloque legislativo del PP, que ha anticipado su rechazo categórico a los mismos, por lo que es previsible que el Ejecutivo contará con esos recursos, provenientes de mayor endeudamiento externo para ejecutarlos en su agenda social que cobra mayor importancia con la crisis mundial que golpeará sin duda a los guatemaltecos más pobres.