El Credit Suisse, segundo banco suizo, anunció ayer una depreciación suplementaria de activos de 2 mil 850 millones de dólares (1 mil 900 millones de euros) en el primer trimestre, debido a la crisis de los créditos inmobiliarios de riesgo en Estados Unidos, un resultado por el que suspendió a varios corredores.
Un portavoz del banco confirmó que quedaban suspendidos de forma provisional «un puñado» de «brokers», después de que una investigación interna mostrara que hubo errores en la fijación de precios en sus actividades de crédito.
Según un portavoz del Credit Suisse, esta nueva depreciación de activos «refleja la evolución del mercado en estas seis semanas y mermará en mil millones de dólares el resultado neto esperado para el primer trimestre», que el banco confía todavía en cerrar en verde.
Tras esta noticia, el título del banco se hundió en bolsa y la acción cerró la sesión en baja de 6,61%, a 53 francos suizos, en un mercado en alza.
Nada más comunicar sus resultados, la entidad indicó que había iniciado un estudio interno, concretamente en sus sistemas de control, ya que había detectado «errores» por parte de «un pequeño grupo de corredores» en sus actividades de crédito.
En 2007, el Credit Suisse anunció un beneficio neto anual de 3% (5.340 millones de euros), aunque el resultado podría ser revisado en función del valor total de las depreciaciones.
Para los analistas, esta noticia amenaza la credibilidad del sistema bancario suizo.
«Es un resultado decepcionante para Credit Suisse, ya que la semana pasada había publicado sus cifras anuales de 2007 y presumió de sus resultados positivos con respecto a otros bancos», lamentó Peter Thorne, analista del banco suizo Helvea.
Para Andreas Venditti, analista del banco cantonal de Zurich, con estas depreciaciones, Credit Suisse «ha perdido una gran parte de la confianza» ganada en la gestión de la crisis de las subprime.
«Esta noticia agrava la mala reputación que muchos bancos suizos merecieron el pasado año debido a su inaptitud financiera», insistió Thorne.
De cualquier manera, Credit Suisse salió mejor parado de la crisis hipotecaria en Estados Unidos («subprime») que el primer banco del país, UBS, que registró en 2007 la primera pérdida de su historia y sufrió depreciaciones de 18.400 millones de dólares.
Hasta ahora, Credit Suisse había anunciado depreciaciones por un valor total de 2.900 millones de francos suizos.