Las autoridades chinas señalaron un gran aumento en el número de niños enfermos por consumir productos lácteos que contenían melamina, que pasó de 53 mil a 294 mil criaturas, y seis bebés podrían haber muerto por tomar leche contaminada con ese aditivo químico industrial.
En un comunicado difundido anoche, el nuevo balance del ministerio de Salud de niños que sufrieron dificultades renales relacionadas con este problema era casi seis veces superior a la cifra original de 53 mil difundida a fines de septiembre.
Dicho comunicado indica que seis decesos desde septiembre podrían haber sido ocasionados por el consumo de productos lácteos contaminados. El anterior balance señalaba tres niños muertos.
No obstante, el ministerio indicó que casi todos los niños que se enfermaron ya no necesitaban atención medica y que lo peor de la crisis ya había pasado.
«A través de intensos esfuerzos de los departamentos del ministerio de Salud, de los organismos médicos y de la masa del personal médico durante los dos últimos meses, el auge ya pasó», afirmó.
La melamina se utiliza normalmente para fabricar plásticos, pero en septiembre se reveló que este producto había sido mezclado con leche aguada y productos lácteos chinos para dar la impresión de que el contenido de proteínas era mayor.
Cuando es consumida en forma excesiva, la melamina puede provocar cálculos renales. Los bebés que fueron alimentados con leche en polvo contaminada fueron los que más sufrieron, porque consumieron una gran cantidad de este producto químico.
El ministerio de Salud chino indicó que los 294 mil niños que se enfermaron sufrieron problemas en el conducto urinario, y que 51.900 de ellos fueron hospitalizados.
Un total de 861 niños siguen hospitalizados, de acuerdo con el ministerio. Este dijo que 154 criaturas se habían encontrado, o se encontraban, en estado grave.
Poco antes, el gobierno central había informado que tres bebés murieron de problemas renales ocasionados por el consumo de leche en polvo contaminada, mientras que una institución regional también señaló un deceso.
La portavoz del ministerio de Salud confirmó hoy que las seis muertes potenciales incluían las tres confirmadas antes.
Un experto occidental en cuestiones sanitarias radicado en China dijo que las estadísticas actualizadas no eran una sorpresa, pues desde hacía tiempo se sospechaba que el número de niños afectados era más elevado que la cifra inicial.
«Hay un ajuste en una gran escala, pero estas cifras reflejan el tamaño de China», sostuvo este experto, que solicitó el anonimato.
Este escándalo se convirtió en un problema mundial cuando se difundieron estas informaciones, en septiembre pasado. Numerosos productos lácteos chinos fueron retirados del mercado o prohibidos en otros países cuando se descubrió que estaban contaminados con melamina.
En el extranjero no se señalaron muertes relacionadas con la melamina, y el gobierno tomó una serie de medidas muy publicitadas para resolver el problema. No obstante, sigue habiendo muy poca confianza en los productos lácteos chinos en el exterior.