El gobierno sudafricano vivió una nueva dimisión en respuesta a la renuncia forzada del presidente Thabo Mbeki, informó la prensa hoy, coincidiendo con los intentos del partido gobernante, el Congreso Nacional Africano (ANC), por disipar la sensación de crisis.
Ayer por la noche, «otro viceministro, Mluleki George, del departamento de Defensa, confirmó su partida», informó el diario The Star.
Esta dimisión se suma a las anunciadas el martes por la presidencia: las de la vicepresidenta Phumzile Mlambo-Ngucka, diez ministros (de 29) y tres viceministros.
Los mercados financieros reaccionaron con pánico a la noticia, sobre todo por la renuncia del ministro de Finanzas, Trevor Manuel, considerado como el artífice del gran crecimiento de la primera economía del continente.
Manuel precisó que había dimitido por «respeto» al jefe de Estado, pero que se ponía a disposición del próximo gobierno.
El ANC, que el sábado provocó la partida de Mbeki al retirarle su confianza en plena guerra interna, anunció que sólo seis de los responsables dimitidos no iban a seguir en el próximo ejecutivo.
«Estas dimisiones no constituyen una crisis, no hay razón para ceder al pánico», dijo el martes Jacob Zuma, que arrebató la presidencia del ANC a Thabo Mbeki en diciembre, durante un congreso con aires de revolución interna.
La bolsa de Johannesburgo cerró con una caída del 3,7%, y la divisa nacional, el rand, perdió un 2,2% de su valor.
«Es fácil pedir que no cunda el pánico», dijo el miércoles Moeletsi Mbeki, analista y hermano del jefe de Estado dimisionario.
«Pero si actúas fuera del marco constitucional, las consecuencias son totalmente imprevisibles», dijo a la emisora de radio 702.