El caso del ex presidente Alfonso Portillo tiene atónito al pueblo de Guatemala y al mundo, al confesar sobre el “soborno” del que fue objeto por el “corrupto” gobierno de Taiwán. Sabemos que casi todos los gobiernos de primer mundo tienen, de alguna forma, sobornados a los países del segundo y tercer mundos, con la finalidad de robar sus recursos naturales y por conveniencias políticas.
El caso Portillo-Taiwán podría no ser más que una artimaña urdida por el gobierno de EE.UU. con la finalidad de complacer a la China continental. La China desde hace unos años pasa momentos difíciles en su economía, pero este gigantesco país le tiene machucada la cola a EE.UU. en virtud de que China es el mayor soporte para evitar la catastrófica caída total del dólar, debido a que China tiene la mayor cantidad de divisas estadounidenses en el mundo.
China continental gana doble partida con esta jugada. Ganará por medio del desprestigio de Taiwán a nivel mundial, para tomar a Latinoamérica entera como socio comercial. Probablemente gane la rendición de Taiwán y retomarlo, como la Isla de Formosa que pertenece a la República Popular de China.
El 15 de julio de 1971 el presidente Nixon anunció a los líderes de la República de China una visita presidencial a Pekín antes de mayo de 1972. «He requerido esta noche este momento en la televisión y la radio para anunciar el mayor avance en nuestros esfuerzos para construir la paz en el mundo» dijo. ¿Sería esa la verdad? Más parecería que fueron a “pedir cacao” personalmente, porque su situación se veía difícil en el horizonte.
El comienzo de las relaciones de Estados Unidos con los países comunistas fue muy bien visto a los ojos de la crítica nacional. La revista Times lo nombró, en 1972, hombre del año, por sus logros alcanzados en 1971, entre ellos, la visita a China.
China es el país con mayor cantidad de Bonos del Tesoro de EE.UU., enfatiza globalasia.com. El país asiático ha incrementado la cantidad de deuda de 7,300 millones de dólares a 1.16 billones de dólares y se ha convertido en el mayor país poseedor de Bonos del Tesoro estadounidense, según ha informado Spanish. China. Org.Cn.
En el punto en que está, la deuda estadounidense sólo puede crecer. Cualquier disminución sería catastrófica. El asunto es que ahora las presiones sobre el dólar se han ido haciendo más fuertes y más devaluaciones son inevitables. Obviamente es ya la política adoptada. El Tesoro pudo ver la llegada de una rara complicidad, inclusive desde China, que adquiría sus bonos y los acumulaba. (China y Japón han acumulado cerca de 900 billones en Bonos del Tesoro). La acumulación mundial, estimada en trillones de dólares, seguía ese camino. El ritmo de crecimiento de otras deudas y el pago de intereses nutrían al sistema. En algún momento, el 80% del ahorro mundial estuvo dirigido a sostener la estabilidad estadounidense.
Portillo pudo ser simplemente el chivo expiatorio de los EE.UU. para entregar Latinoamérica a la China, desprestigiando a Taiwán. ¿Quién podrá tirar la primera piedra?