El expresidente Sudafricano Nelson Mandela, fallecido el 5 de diciembre, dejó una herencia de unos 46 millones de rand (3,1 millones de euros/4,1 millones de dólares), repartidos entre su familia, exempleados, instituciones educativas y su partido, según informó hoy el Tribunal Supremo del país.
El líder antiapartheid dejó 1,5 millones de rand a una fundación familiar que vela por los hijos que tuvo con sus dos primeras mujeres, Evelyn y Winnie, y por sus nietos. Con su tercera esposa, Graca Machel, no tuvo ningún hijo.
Zelda la Grange, exasistente de Mandela, y otros ocho de sus antiguos empleados, recibirán 50 mil rand cada uno.
Además, dos escuelas y dos universidades a las que asistió Mandela recibirán 100 mil rand cada una. La escuela secundaria de la población natal de Mandela, Qunu, y el instituto Orlando West de Soweto, están entre las instituciones afortunadas.
Además, el partido del Mandela, el gobernante Congreso Nacional Africano (CNA), tendrá el usufructo de los derechos de autor de algunos de sus libros.
Según la ley, la viuda de Mandela, Graca Machel, tiene el derecho a percibir el 50 por ciento de su herencia. Ahora, tendrá nueve días para impugnar el testamento si decide hacerlo, informó el vicepresidente del Tribunal Supremo, Dikgang Moseneke.
Había temores de que hubiese disputas en el seno de la familia Mandela respecto a la herencia, entre reportes de que algunos miembros de la familia querrían echar a Machel de la casa que compartía con Mandela.
Pero Moseneke aseguró que la familia estaba «satisfecha» con la herencia y que no estaba al corriente de que alguien quisiese impugnarla.