Maduro ya debe de estar sintiendo que se le mueve el taburete


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En la ciudad de Caracas y en algunos otros lugares de Venezuela, los opositores al gobierno que preside Nicolás Maduro han principiado a manifestar decididamente en calles, plazas y carreteras, sin ambages ni reticencias, su total repudio al citado régimen surgido tras la muerte de Hugo Chávez Frías.

Marco Tulio Trejo Paiz


Incluyentes medios de comunicación han estado informando acerca del descontento popular contra los actos represivos de evidente molde dictatorial.

Multitudinarias manifestaciones del estudiantado y de la clase trabajadora están haciendo justos planteamientos al gobernante Maduro. ¡Ya hubo muchos manifestantes muertos, heridos y detenidos!

Es elocuente y muy significativo el contenido del artículo de John Carroll, publicado recientemente en este vespertino bajo el título “A remojar las barbas señor Maduro”.

Don Nico, erigido en dictador, pero usando antifaz “democrático” por haber asumido el poder mediante unas elecciones -dizque honrando al sistema libertario-democrático- está usurpando autoritariamente, como, colocado de posaderas a la ciudadanía, las funciones del Parlamento que, por cierto, es mayoritariamente de tipo “bolivariano” y, de ribete,  “madurista”…    De repente Maduro ya se está poniendo muy maduro para correr el riesgo de afrontar un movimiento que puede moverle la poltrona…

Un conocido refrán reza: “¿Si así son las vísperas, ¿cómo serán las fiestas?” ¿Muy alegres, con relámpagos, truenos y centellas, no? ¡Habría que pensar y preverlo todo!

No es fácil ejercer el supremo mando de una nación, como manejar un autobús, dirán irónicamente los venezolanos en alusión a las cualidades y calidades de don Nico…

Capriles, el más severo adversario del auriga de la patria de Simón Bolívar, debe de estar aprovechando la grave situación. Lo sigue media población y querrá hacerle buenas cosquillas a Maduro, pero éste hace como que no concede importancia a los oleajes de protesta, suscitándole más problemas.

Los Castro, viejos mandamases de la Cuba comunista, estarán asesorando a control remoto a don Nico Maduro sobre cómo gobernar hoy que Venezuela soporta una superinflación; una devaluación monetaria; una oposición que se infla y fortalece progresivamente, una problemática de índole económico-financiera; un aislamiento frente a países que no ven con buenos ojos lo que se traen quienes gobiernan o desgobiernan en Ecuador, en Bolivia, en Nicaragua, en la Cuba tiranizada a lo soviético; en la propia Venezuela y en otros países de Amerindia.

Los que en una forma u otra se han hecho del poder en la región dan la impresión de ir a horcajadas de un trasnochado “internacionalismo” estaliniano que se quedó muy lejos para bien de las naciones que enarbolan banderas libertario-democráticas y rechazan las frías y toscas cadenas que caracterizan al totalitarismo ominoso y atroz.

Ya se está produciendo un notorio enfriamiento y un no menos estancamiento de  acciones político-ideológicas que con salpicaciones demagógicas y osadas pretensiones contra los Estados Unidos de América trataba el ahora difunto Hugo Chávez Frías, quien ofrecía solidaridad y  apoyo a lo chantajista con el petróleo entre los estados latinoamericanos que han quedado como atrapados en una red en la que no cayeron los países que desean una vida libre, soberana e independiente.

Viene todo esto que comentamos como periodistas sin ataduras de especie alguna, en relación con el caso específico de Venezuela, donde Nicolás Maduro se está pasando de maduro como para alertar a paniaguados y a despertar interés entre la comunidad internacional ansiosa de cambios positivos, ¡no negativos como en el Caribe y el sur!…

Entretanto, hay que seguir el curso de los acontecimientos de Venezuela, porque no deja de interesar a los guatemaltecos lo que acontece cada día que pasa, sin descartar lo que se pretende respecto de los países de nuestra América Indiana que han rechazado el eslabonamiento politiquiento de los dictadores cubanos y venezolanos, entre otros liberticidas.