Lugares estratégicos del mundo, según WikiLeaks


Una mujer lee información en la página principal de WikiLeaks. FOTO LA HORA: AFP KAREN BLEIER

El sitio web WikiLeaks publicó una lista secreta de los lugares estratégicos en el mundo que Washington quiere proteger contra eventuales atentados, al considerar que su «pérdida» afectarí­a notablemente la seguridad de Estados Unidos.


El nuevo documento diplomático es uno de los más explosivos hasta el momento de los divulgados en el marco del escándalo que puso a Washington en una situación embarazosa y generó reacciones airadas en gobiernos de todo el mundo.

Este cable del Departamento de Estado fechado en febrero de 2009 pide a las representaciones diplomáticas estadounidenses inventariar las infraestructuras y empresas en el mundo «cuya pérdida afectarí­a de manera significativa la salud pública, la seguridad económica y/o la seguridad nacional de Estados Unidos».

En la lista publicada anoche figuran cables submarinos de telecomunicaciones, puertos, minas y empresas que fabrican, entre otras cosas, productos farmacéuticos importantes para la salud pública en paí­ses que van desde Gran Bretaña a Nueva Zelanda, incluyendo ífrica, la Pení­nsula Ibérica, Medio Oriente y China.

Los sitios o elementos de importancia estratégica incluyen al estrecho de Gibraltar y al gasoducto que une a la Pení­nsula Ibérica con Argelia, además de la compañí­a farmacéutica Instituto Grifols, de Barcelona, fabricante de inmunoglobulina de uso intravenoso, de diversas aplicaciones terapéuticas.

También se menciona una planta hidroeléctrica canadiense, que es descripta como una «crí­tica fuente de energí­a irreemplazable para partes del noreste de Estados Unidos», mientras que una fábrica de Siemens en Alemania tiene «producción esencialmente irreemplazable de quí­micos clave».

Figuran asimismo firmas europeas de vacunas contra la viruela y la rabia, un fabricante italiano de tratamientos para mordeduras de serpientes venenosas, y una empresa alemana de tratamientos contra el envenenamiento por plutonio.

Según el documento, el pedido fue diseñado «para fortalecer la preparación nacional, la respuesta en tiempo, y la rápida recuperación en caso de ataque, catástrofe natural u otra emergencia».

La lista ayudarí­a a «prevenir, disuadir, neutralizar o mitigar los efectos de esfuerzos deliberados de terroristas para destruir, incapacitar o explotar» los sitios considerados de importancia «vital» para Estados Unidos.

Gran Bretaña rápidamente condenó la divulgación de la lista por «dañar la seguridad nacional». El cable incluye las ubicaciones británicas de cables submarinos, sistemas satelitales y plantas de defensa.

«Condenamos inequí­vocamente la divulgación no autorizada de información confidencial», dijo un portavoz del primer ministro británico David Cameron.

La nueva publicación se suma al escándalo polí­tico desatado por WikiLeaks y su fundador Julian Assange, de 39 años, quien dí­as atrás declaró que debió reforzar su seguridad después de recibir amenazas de muerte.

WikiLeaks ha sumido a la diplomacia estadounidense en un caos desde el comienzo de la publicación de las notas diplomáticas el 28 de noviembre.

Entre otras revelaciones, en los cables difundidos recientemente surgieron detalles de una conversación del entonces lí­der australiano, Kevin Rudd, con la secretaria de Estado norteamericana Hillary Clinton en marzo de 2009.

Rudd llamó a «integrar a China efectivamente en la comunidad internacional y a permitirle demostrar una mayor responsabilidad, al tiempo de prepararse para un despliegue de fuerzas si todo sale mal».

ESTADOS UNIDOS Cambios diplomáticos


Estados Unidos estudia una importante reorganización de diplomáticos, oficiales militares y agentes de inteligencia que se han visto involucrados en el escándalo de WikiLeaks, según un informe de la prensa norteamericana difundido ayer.

El sitio de internet The Daily Beast señaló que las revelaciones de WikiLeaks han vuelto «peligroso» sino «imposible» hacer su trabajo a quienes han sido fuertemente crí­ticos de gobiernos corruptos o incompetentes.

«Vamos a tener que sacar a alguna de nuestra mejor gente (…) porque ellos se han animado a informar sobre la verdad de los paí­ses en los que sirven», dijo un alto funcionario de seguridad nacional al sitio web.

Aunque el proyecto está en sus comienzos, el Departamento de Estado, el Pentágono y la CIA están trabajando con la suposición de que cambiarán personal de varias embajadas estadounidenses y habrá consultas al respecto en los próximos meses, indicó el informe.

Consultada sobre la información de los cambios, Leslie Phillips, portavoz del Departamento de Estado, dijo a la AFP que «lo harí­amos si fuera necesario», sin dar más detalles.

WikiLeaks sumió a la diplomacia norteamericana en un caos cuando comenzó a revelar hace una semana más de 250.000 cables clasificados del Departamento de Estado.