Cuando falta una semana para el inicio de la Copa del Mundo, las selecciones entraron en una fase decisiva con la reducción de sus efectivos a 23 jugadores, que siguen llegando a Sudáfrica, mientras los partidos amistosos dan las primeras tendencias.
Primera selección en pisar tierra sudafricana, a excepción de los anfitriones, Australia fue la última en comunicar su lista de 23 jugadores, al revelarla ayer al mediodía, después que venciera el plazo dado por la Fifa el martes a las 22H00 GMT.
Mientras Brasil y Argentina ya llegaron, la mayoría de los equipos europeos siguen preparándose lejos de Sudáfrica, a excepción de Inglaterra que llegó la mañana del jueves.
La mayoría cosechó resultados regulares en los partidos de preparación. A pesar de seguir invictos, selecciones como España, campeona de la Eurocopa-2008, Alemania, Francia, Holanda y Portugal, no han logrado todavía prestaciones convincentes.
Mientras Brasil se deshizo de Zimbabue por 3-0 y Argentina goleó a Canadá 5-0, España logró una corta victoria contra Arabia Saudí (3-2), Francia no pasó del empate contra Túnez (1-1) e Inglaterra derrotó por la mínima a Japón (2-1).
Estos resultados tienen que ser relativizados, debido a la forma dispar de los jugadores tras disputar un largo campeonato nacional y la reciente final de la Champions para los efectivos del Bayern Múnich y el Inter de Milán.
También es cierto que algunos seleccionadores siguen buscando su equipo titular y multiplican las pruebas.
Los equipos africanos, por su parte, tienen una preparación más bien discreta.
Mientras Sudáfrica multiplica las victorias contra equipos menores para acumular confianza antes de iniciar el Mundial contra México el próximo viernes, los grandes equipos del continente siguen una preparación ambiciosa, pero también arriesgada.
Los equipos de Ghana y Camerún fueron goleados por Holanda (1-4) y Portugal (1-3), respectivamente, mientras Costa de Marfil cayó 2-0 contra Paraguay.
En cambio, Australia y Nueva Zelanda siguen sorprendiendo y parecen no estar dispuestas a hacer únicamente acto de presencia.
Tras meses de preocupación generada por la inseguridad en Sudáfrica, el Mundial parece avanzar por buen camino.
El país «hizo un buen trabajo» y está «listo», declaró el general Ward, comandante de las Fuerzas Armadas estadounidenses en ífrica.
La mayor preocupación es la posible llegada de 800 barrabravas argentinos.
En Argentina, hasta hay polémica para determinar quién permitió que treinta de ellos pudieran viajar con el equipo a Sudáfrica.
Las fuerzas de seguridad sudafricanas, además de tener que vigilar a sus propios delincuentes, tendrán que contar con la presencia de hinchas peligrosos procedentes de países como Inglaterra, Holanda y Alemania.
La FIFA, que espera que el ex presidente sudafricano Nelson Mandela acuda al partido de apertura entre su país y México, se declara ante todo preocupada por los grandes atascos que podrían producirse a proximidad de los estadios.
Los transportes podrían ser «una pesadilla», advirtió el secretario general de la organización, Jérí´me Valcke.
Pero las críticas las más duras hasta ahora fueron contra el balón oficial del Mundial llamado «Jabulani». Porteros y delanteros se quejaron de los movimientos impredecibles de la pelota que hasta fue calificada de «balón de playa» por algunos de ellos.
La selección de Inglaterra llegó hoy por la mañana a Sudáfrica donde disputará el Mundial de fútbol que se celebra en el país entre el 11 de junio y el 11 de julio, constató un periodista de la AFP.
Los ingleses junto a su técnico, el italiano Fabio Capello, vistiendo trajes grises, aterrizaron en el aeropuerto internacional de Johannesburgo rodeados por un importante dispositivo de seguridad.
La delegación subió luego a un autobús en dirección a Rustenburgo, a dos horas del aeropuerto, donde está situado el campo de base de la selección.
Inglaterra se estrena en el Mundial el 12 de junio contra Estados Unidos, antes de enfrentarse, en el grupo C, a Argelia (18 de junio) y Eslovenia (23 de junio).