Llevar los pantalones caídos dejando asomar las nalgas o la ropa interior puede ser ilegal en Luisiana o Georgia, pero en Nueva York un juez sentenció que la Constitución no dicta la moda.
Un policía de Nueva York había multado recientemente a un hombre en el Bronx (norte de la ciudad) por llevar los pantalones caídos muy por debajo de la cintura, una práctica que muchos quieren prohibir por considerarla indecente.
Sin embargo, el juez Ruben Franco del Bronx decidió que esa moda no podía ser considerada ilegal. «No en Nueva York», dijo Franco en declaraciones a la televisora CBS difundidas ayer.
«Alguien puede considerar que esa forma de vestirse es de mal gusto, pero no es ilegal», agregó el magistrado. «La Constitución permite a la gente hacer locuras a la hora de vestirse», sentenció.
El propio alcalde Michael Bloomberg salió al ruedo, también en defensa de la libertad de vestirse como a cada cual le plazca. «No juzgo a la gente por su apariencia –declaró el alcalde–, la juzgo por sus actos».
Dos ciudades de Georgia y Luisiana con importante población de afroamericanos –que son quienes más practican esa moda en Estados Unidos– lograron prohibirla recientemente.