Los maestros son la clave


En el último artí­culo del año pasado cuestioné básicamente si los maestros saben lo que les espera con la implementación del programa de estándares educativos para que el programa tenga éxito.

Raymond J. Wennier

Estoy convencido de que para lograrlo habrá que cambiar la jornada de trabajo de apenas cinco horas que incluyen la entrada a sus labores, recreo/refacción y terminar clases para salir de la escuela a las 12:30, hora en que finaliza la jornada de trabajo.

Hablé de una planificación especí­fica de acuerdo al programa de estándares educativos y lo que ésta demanda. No es la primera vez que escribo sobre la necesidad de que los maestros tengan más tiempo para una planificación eficiente que realmente mejore el proceso educativo en el aula. En junio 2002 demostré que si no hay una reestructuración total del Mineduc los maestros no tendrán la posibilidad de mejorar lo que están haciendo; con este programa de estándares, tendrán que: 1. Trabajar tiempo completo, por ejemplo, de 7:30 a 15:30 horas y habrá que reestructurar todo lo que se hace en la escuela durante este perí­odo de tiempo. 2. Para lograr esta jornada de ocho horas, tendrá que revisarse la remuneración al Magisterio para DIGNIFICAR al gremio; el Decreto Legislativo 1485 tendrá que ser revisado para el beneficio de cada maestro y no tener que esperar 4 años para una mejora salarial a pesar de haber obtenido un profesorado o una licenciatura durante ese lapso. ¡Tienen que ser bien REMUNERADOS! 3. Con una jornada de trabajo como la sugerida, habrá que revisar la contratación de los maestros para que vivan lo más cerca posible a la escuela en la que laboran para que no tengan que gastar varias horas en transporte antes y después de la jornada escolar y a un costo oneroso para su presupuesto. Si así­ es, podrán entrar el lunes a las 7:30 y terminar el viernes a las 15:30, trabajando jornada completa diaria, lo que nos da 180 dí­as reales de clase por ocho horas diarias, es igual a 1,440 horas de escolaridad que dan oportunidad de proveer ricas experiencias educativas a los alumnos y no las cerca de 900 horas anuales que hoy se trabajan. 4. Con una jornada escolar de ocho horas diarias se puede tener una planificación en equipo, un trabajo de grupo, con clases muy reducidas como para poder dar ayuda especial al alumno que lo necesite y asegurarse que todos los niños alcancen el éxito y quieran permanecer en la escuela porque realmente significa algo para ellos. También se puede planificar en equipo, múltiples formas de evaluar y donde cada maestro tendrá la oportunidad de aportar ideas de cómo se puede evaluar en formas distintas y de acuerdo a como se ha enseñado tomando en cuenta a cada niño en su individualidad, en sus tres C’s: Cabeza, corazón y cuerpo. El Consejo local de educación arreglará la forma de que las escuelas y sus maestros, ambos alejados y dispersos, trabajando en aulas unitarias o escuelas multigrado, también puedan tener acceso a reunirse con otros maestros para tener el apoyo y el beneficio del equipo. 5. No importa cómo se le llame, todo grupo humano, en este caso los maestros, puede beneficiarse con otras opiniones, otras enseñanzas, sugerencias de cómo hacer las cosas. Para poder hacerlo es necesario que un educador con experiencia y estudios superiores sea el eje de unión entre un grupo de maestros y los «clusters» de escuelas. Cada departamento y cada pueblo tiene personas que llenan ese perfil, es cuestión de buscarlos y hacerles una oferta que no puedan resistir para trabajar en su propia área de influencia.

Una de esas personas debe ser el DIRECTOR. Los directores trabajarí­an tiempo completo y parte de sus funciones serí­a ayudar tanto a los maestros como a los alumnos a obtener el éxito en la escuela. Los directores educativos serí­an las personas más cercanas a la realidad de cada escuela y ayudarí­an a cada maestro a planificar y a prepararse mejor para el beneficio de cada niño que asiste a la escuela.

El 5 de mayo de 2004 presenté un escrito de «lluvia de ideas» a la ministra de Educación, ingeniera Marí­a del Carmen Aceña de Fuentes, acerca de la «Creación del puesto de Director para todas las escuelas públicas en Guatemala».

El sistema educativo de Guatemala necesita una REESTRUCTURACIí“N total.

Que tengan un año feliz y mucha prosperidad.