Los triunfos de la mexicana Lorena Ochoa parecen suscitarse de manera interminable uno tras otro, por ejemplo, ayer ganó el torneo de golf de Orlando (Florida), prueba del circuito de la LPGA con 2,6 millones de dólares.
Nacida el 15 de noviembre de 1981, en Guadalajara, Jalisco, la azteca aprendió de inmediato a jugar al golf, por tanto que a los 5 años ya sabía que esta era su pasión.
Los triunfos no se hicieron esperar; luego de haber iniciado la práctica del golf se agenció su primer título estatal y de inmediato vino el de nivel nacional. A partir de entonces ha ganado títulos en todas las categorías en las que ha participado.
A los 8 años estaba ubicada en el primer puesto del ranking junior, pero ese mismo año ganó el primero de sus cinco títulos del Campeonato Mundial Junior, en San Diego, California.
La golfista tapatía viene de ganar dos torneos consecutivos cuando a principios de mes se impuso en Rancho Mirage (California), su primer Grand Slam del año, y repitió la fórmula de éxito la semana anterior en Morelia, en su natal México.
Antes del Rancho Mirage, después de refrendar su título en Superstition Mountain, Arizona, Ochoa ratificó su condición de número uno del mundo en un escenario demandante.
La tapatía está luchando para lograr tanto triunfos como le sea posible y convertirse en la «Tiger» Woods del circuito femenino.
Alcanzó la cima mundial del golf femenino en abril del año pasado. Mantiene una fundación que lleva su nombre, que está destinada a la educación y al fomento del deporte.
La figura de Ochoa es más marcada debido a que en su país se sufre y suspira por el futbol, siendo la segunda mexicana en hacerse miembro de la gira femenina más importante del mundo.