LO QUE CREEN LOS PRESIDENCIABLES


Lo que estamos escuchando de parte de los polí­ticos no es nada nuevo ni nada que nos convenza para poder darles nuestro voto. No es que les pida a los lectores que no voten; no, lo que les pido es que pensemos y veamos quién es realmente el personaje idóneo para poder llegar al Guacamolón.

Fredy Padilla / A-1 658223

 


Hay que votar porque hay que hacerlo, lo que tenemos que evitar es dejarnos engañar por las cancioncitas que se escuchan por la radio. Tenemos que estudiar las propuestas, las ideas, las estrategias y las miras hacia el futuro que tiene cada candidato, tanto a la presidencia como a la alcaldí­a.

Lo que la mayorí­a de aspirantes a un puesto dentro del Gobierno ofrecen es lo mismo que ofreció nuestro apático y (¡gracias a DIOS!) saliente presidente, que en los cuatro años que estuvo a cargo no se vio nada de lo que prometió. Los que están en la lucha por el poder, casi todos lo primero que dicen que van a combatir es la delincuencia, las maras, el crimen organizado; pero nosotros sabemos que como está la situación ya es un tanto difí­cil hacer tal cosa. Esa lucha la hubieran iniciado desde que se empezaron a ver focos de la infección de ese mal, que ahora lo tenemos tan enraizado que va a costar no solo pérdidas humanas sino miles de quetzales.

Yo le pregunto a don Otto Pérez quien, según las encuestas es uno de los favoritos para el evento que se nos aproxima, ¿si él quedara como presidente, realmente harí­a lo que en estos momentos promete? También a Baldizón, él dice “Vamos a dar castigos ejemplares a los delincuentes y vamos a IMPLEMENTAR LA PENA DE MUERTE’’.

Se han puesto a pensar en que no solo la delincuencia nos está malogrando la vida sino también, algo muy importante es la pobreza en que vivimos, los niños que están desnutridos en los diferentes departamentos de Guatemala, la educación en las escuelas públicas que en vez de llenar las expectativas de enseñar mejor a los estudiantes  lo que sucedió fue que se superpoblaron y muchos se quedaron hasta sin pupitres; eso es algo tan importante como todos los otros males que aquejan al guatemalteco.

Dijo un cómico muy conocido en una de sus pelí­culas, primero hay que acabar con los pobres, pero dándoles de comer, dándoles trabajo, educación para que tengan el tiempo ocupado y no estén pensando en cosas malas en contra de la gente que trabaja.

Señores aspirantes a la presidencia, están a tiempo que piensen en cómo solucionar los problemas delicados de nuestra patria, pero que no quede solo en el pensamiento sino que se haga realidad para bien de todos los que pertenecemos a esta patria llena de penas y dolor, males dejados por los tí­teres que se creyeron presidentes y no fueron más que un ave de paso, sin pena ni gloria por no haber hecho nada más que hundir más a Guatemala en la angustia y desesperación en que vivimos.