Llaman a replantear consumo de energí­a nuclear


Protesta. Un manifestante utiliza una mascarilla antigas, durante una protesta en contra de la Planta de Energí­a Nuclear Kruemmel en Geesthacht, Alemania. (AFP / La Hora)

La élite empresarial y polí­tica de la energí­a de la Unión Europea (UE) defendió este lunes en un coloquio en Madrid una reflexión sobre el consumo de energí­a nuclear, que podrí­a solucionar algunos problemas energéticos de Europa en el futuro.


«Los estados miembros no pueden eludir la cuestión de la energí­a nuclear, es necesario mantener un debate total y franco sobre el problema», declaró este lunes en Madrid el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso.

Barroso intervino en un coloquio energético en homenaje a la ex comisaria europea de Energí­a Loyola de Palacio, fallecida en 2006 y defensora de este tipo de energí­a.

El comisario europeo de Energí­a, Andris Piebalgs, y de Competencia, Neelie Kroes, también estuvieron presentes, además de los dirigentes de los grupos españoles Endesa y Union Fenosa, los franceses EDF y Areva, el alemán E.ON, el italiano Enel y el anglo-holandés Shell.

Neelie Kroes se declaró «totalmente favorable a la energí­a nuclear», mientras Piebalgs pidió «valor para hablar de ello».

En una entrevista en el diario El Paí­s, estimó que hay que mantener un nivel de electricidad nuclear del 30% para garantizar la seguridad energética en los paí­ses de la UE.

«Nos enfrentamos a un renacimiento de la energí­a nuclear», manifestó la presidenta de Areva, Anne Lauvergeon, mientras Pierre Gadonneix, presidente de EDF, gran productor de energí­a nuclear, se declaró «convencido de que la energí­a nuclear es la respuesta a los desafí­os europeos».

La electricidad nuclear tiene la ventaja, según sus promotores, de no producir gases de efecto invernadero, no tener que depender de los productores de gas ni de petróleo y ofrecer visibilidad en términos de costes.

El entusiasmo por la energí­a nuclear se observa actualmente en varias partes del mundo, sobre todo en Estados Unidos, Gran Bretaña y China, pero algunos paí­ses se oponen, como Alemania y España, que ha decidido dejar sus centrales morir al término de su ciclo.

«El abanico energético», es decir, toda la gama de energí­as utilizables, «es fundamental. No deberí­amos abandonar ninguna tecnologí­a. Estoy claramente a favor de la energí­a nuclear y de las energí­as renovables», declaró Rafael Miranda, director general de Endese y presidente de Eurelectric, la organización patronal europea de la energí­a.

Barroso insistió en que «no es el papel de la UE decidir por los estados miembros si utilizar o no la energí­a nuclear», y añadió que la composición del paquete energético sigue siendo «competencia nacional».

Este llamamiento a los paí­ses europeos se produce menos de un mes después de un reciente diferendo entre Francia, gran usuaria de energí­a nuclear, y Alemania, en contra.

El presidente francés, Nicolas Sarkozy, pidió a Alemania que vuelva a utilizar la energí­a nuclear además de las renovables, lo que no fue apreciado por Berlí­n.

Wulf Bernotat, presidente de la alemana E.ON, defendió que en su paí­s, la energí­a nuclear es una cuestión «religiosa», en referencia a la gran militancia antinuclear. La opinión pública «tiene que cambiar» y la energí­a nuclear «deberí­a tener un lugar» en Alemania», estimó.

«Los estados miembros no pueden eludir la cuestión de la energí­a nuclear, es necesario mantener un debate total y franco sobre el problema.»

José Manuel Durao Barroso

presidente de la Comisión Europea