El secretario general de la ONU Ban Ki-moon llamó a los países ricos a honrar su promesa de 2005 de duplicar su ayuda para ífrica, al abrir el lunes una cumbre sobre el desarrollo en ese continente.
«Llamo a todos los donantes a implementar (los compromisos de) la cumbre de Gleneagles de 2005 para más que duplicar la ayuda hacia ífrica», dijo a los líderes reunidos, antes la creciente preocupación de que ese continente está quedando rezagado en relación al resto del mundo en los esfuerzos por reducir la pobreza para 2015.
En una cumbre en 2005 en la ciudad escocesa de Gleneagles, los países del G8 -Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Italia, Japón y Rusia- prometieron aumentar su ayuda a Africa con una donación extra de 25.000 millones de dólares para 2010.
Desde entonces, varias revisiones han reducido esa cifra a 21.800 millones de dólares, y según la ONU la ayuda para el desarrollo solo ha aumentado en un cuarto de ese monto.
La reciente crisis del mercado financiero mundial, que ha llevado a un plan del gobierno de Estados Unidos para rescatar con un paquete de 700.000 millones de dólares a la economía probablemente no aumente las donaciones de los países donantes.
En un informe divulgado el 11 de septiembre, Ban advirtió que los Objetivos del Milenio para el Desarrollo (OMD) acordadas por los líderes mundiales hace ocho años podrían no cumplirse en la fecha objetivo de 2015, especialmente en ífrica.
Ban lamentó un déficit de 10.000 millones de dólares en los compromisos de los donantes, con la ayuda total de parte de los países de la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) de solo un 0,28% de su Producto Interior Bruto combinado, frente a un objetivo de la ONU de 0,7%.
«Ahora tenemos una idea clara de lo que se necesita», dijo el lunes Ban a representantes de más de 160 países, entre los cuales el presidente francés Nicolas Sarkozy y el tanzano Jakaya Kikwete.
«Costará unos 72.000 millones de dólares por año en financiamiento externo lograr los OMD (en Africa) para 2015», añadió el secretario general de la ONU. «Esta cifra puede parecer sobrecogedora. Pero es asequible y concuerda con los compromisos existentes», dijo.
Por su parte, el francés Nicolas Sarkozy afirmó que la Unión Europea (UE), que preside su país hasta fin de año, respetará sus promesas de ayuda a ífrica.
«El Consejo Europeo de junio de 2008 acaba de confirmar el objetivo de la Unión de consagrar 0,7% de su riqueza para la ayuda para el desarrollo en 2015», dijo Sarkozy.
La reunión sobre ífrica se desarrolla un día antes del inicio del debate anual general de la Asamblea General de la ONU.