Mike Tice recuerda aquel partido como la noche en la que casi renunció.
El coach de la línea ofensiva de los Bears miró horrorizado la forma en que Jay Cutler fue capturado nueve veces durante el partido que Chicago perdió ante los Giants de Nueva York. Fue una actuación terrible de la línea, que pudo haber marcado el final de la labor de Tice.
«Casi renuncio», recordó
En vez de ello, el equipo ha mejorado.
Los miembros de la línea han comenzado a frenar a los rivales, y los Bears (11-4) se dirigen ahora a los playoffs por primera vez en cuatro años, con el descanso garantizado para la primera ronda de la postemporada, lo mismo que el puesto de primeros preclasificados de la Conferencia Nacional.
El domingo, jugarán su último encuentro de la campaña regular, contra Green Bay.
Ha sido un repunte tremendo para un equipo que parecía a la deriva al comienzo de la campaña, al perder tres de cuatro encuentros antes de su semana de descanso, después de iniciar con una foja de 3-0.
Tras la mala racha, los Bears han ganado siete de ocho partidos, y uno de los principales motivos de la mejoría es el bloqueo en la línea.
Ha sido mejor, pero no perfecto.
Aún así, marca un cambio para una línea que es última de la NFL y que ha permitido 50 capturas del mariscal de campo, la mayor cifra en la liga.
Cutler sigue de pie, con 19 capturas en los últimos ocho partidos, en comparación con 27 en los primeros seis. Matt Forte encuentra espacio para correr, y promedia 4,7 yardas por acarreo durante esta nueva era. En los últimos cinco encuentros, su promedio ha sido de 5,7 yardas.
De pronto la línea no parece tan vulnerable.