El teléfono suena insistentemente; las llamadas provienen en cuatro ocasiones del mismo número, pero nadie responde cuando Natividad explica que se han comunicado al 1571, lí­nea de asistencia legal gratuita a mujeres ví­ctimas de violencia; la operadora cuenta que muchas llamadas son como ésta, no obstante, advierte de lo pernicioso que pueden ser, pues desví­an la atención de una emergencia real.

El Instituto de la Defensa Pública Penal (IDPP), instaló el 25 de noviembre de 2008 el Centro de Atención de llamadas de emergencia, el cual por medio de la comunicación telefónica al 1571 busca que las mujeres ví­ctimas de violencia tengan acceso a protección inmediata o asesorí­a jurí­dica, por lo que coordinan acciones con los cuerpos de socorro y la Policí­a Nacional Civil.

Desde su apertura ha recogido más de 38 mil llamadas; las y los operadores que atienden las 24 horas, reciben entre 150 y 400 consultas o atención de emergencias en un solo dí­a. Según Amalia Mazariegos, coordinadora nacional de Asistencia Legal Gratuita del IDPP sólo el 40% (15 mil 200) de las llamadas son efectivas, es decir, requieren asesorí­a y atención emergente.

CULTURA

«Centro de emergencia en qué le puedo ayudar, usted se ha comunicado al 1571», Natividad Dí­az irrumpe su relato en varias ocasiones cuando explica el funcionamiento del Centro; ella es una de las seis operadoras que atienden la lí­nea 1571. Durante la conversación de 40 minutos, el teléfono timbró unas diez ocasiones en que nadie respondió.

Natividad se lamenta ya que, debido «a la difí­cil cultura del paí­s», se reciben infinidad de llamadas donde las personas permanecen en lí­nea, pero no requieren ninguna información; ella debe esperar a que la persona cuelgue, pero, hay ocasiones donde la misma tarda hasta un minuto.

El Centro de Atención es operado por seis personas que han cerrado la carrera de Derecho y recibieron capacitaciones para orientar debidamente a quienes requieren el servicio gratuito.

En el perí­odo de 6:00 a 14:00 horas, que antecedió al de Natividad, se recibieron unas 50 llamadas -ninguna emergencia-. Casi al concluir el turno de la madrugada, de un jueves, a eso de las 5:30 horas, se registró la solicitud de una mujer desesperada que buscaba asesorí­a y medidas de seguridad.

Pese a tener que lidiar con llamadas irresponsables, según Maively Escobar, directora de relaciones públicas del IDPP, dice que los viernes por la noche, así­ como los fines de semana, lamentablemente, el mayor porcentaje de las atenciones que brinda el centro son mujeres o infantes pidiendo ayuda de emergencia.

La mayorí­a de mujeres que buscan orientación legal para conocer dónde pueden denunciar el maltrato, pedir medidas de seguridad o conocer la ubicación de los albergues lo hacen principalmente por las mañanas, según la operadora, el comportamiento se podrí­a deber a que en ese lapso del dí­a, el agresor está fuera de la casa.

Natividad estima que en la medida en que el número 1571, tenga mayor difusión, la atención de casos reales será mayor, por lo que pide a las personas que no requieran verdaderamente atención, se abstengan de marcar, ya que se podrí­a perder la oportunidad de salvar una vida.