Limpieza étnica en Rep. Centroafricana


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El éxodo de decenas de miles de musulmanes de la República Centroafricana equivale a una «limpieza étnica», dijo hoy Amnistía Internacional, y advirtió que la violencia sectaria en curso, pese a la presencia de miles de soldados de paz, es una «tragedia de proporciones históricas».

Por KRISTA LARSON, DAKAR, Agencia AP

Su informe emitido el miércoles tuvo lugar mientras el secretario general de las Naciones Unidas Ban Ki-moon dijo temer que la violencia en el país africano podría dividir esa nación en un norte musulmán y un sur cristiano, ya que «la brutalidad sectaria está cambiando la demografía del país».

«No podemos seguir diciendo ‘nunca más’, eso lo hemos dicho muchas veces», indicó Ban el martes por la noche. «Debemos actuar concertadamente y ahora para evitar la continuidad de las atrocidades a escala masiva».

Más de mil personas han muerto desde que estalló la violencia sectaria a principios de diciembre y casi un millón de los 4,6 millones que viven en este país han huido de sus casas.

La minoría musulmana del país, el 15% de la población, ha sido atacada no solamente por los milicianos cristianos sino por una turba civil que ha realizado matanzas públicas casi a diario. En la mayoría de los casos, los cadáveres de las víctimas musulmanas fueron mutilados y en ocasiones arrastrados por las calles o incendiados.

Durante meses, funcionarios de la ONU y franceses advirtieron que podría ocurrir un genocidio en la República Centroafricana, y Amnistía utilizó la expresión «limpieza étnica» para describir la violencia comunal que sacude al país.

Amnistía Internacional dijo que la expresión está justificada «dado el nivel de violencia y el desplazamiento forzoso que hemos visto», indicó Joanne Mariner, asesora de la organización en Bangui, la capital de la República Centroafricana.

«El éxodo de musulmanes de la República Centroafricana es una tragedia de proporciones históricas. No solamente la tendencia actual de limpieza étnica causa un tremendo daño a la propia República Centroafricana; establece un precedente terrible para otros países en la región, muchos de los cuales tienen ya sus propios conflictos sectarios e interétnicos», dijo el informe.

La ola de violencia contra los musulmanes civiles está siendo cometida por la milicia cristiana llamada anti-Balaka, o antimachete, que arreció sus ataques cuando el gobierno musulmán insurgente se desplomó en enero.