La UE y China pusieron fin a sus recientes disputas con el compromiso de una mayor cooperación para enfrentar la crisis económica mundial.
Además, hicieron el anuncio de la celebración de una nueva cumbre bilateral, dos meses después de la anulación de un encuentro de ese tipo por la cuestión del Tíbet.
Durante una visita del primer ministro chino Wen Jiabao a Bruselas, las dos potencias acordaron además organizar una reunión de alto nivel sobre temas comerciales -muchas veces objeto de disputa por las acusaciones de dumping de los europeos contra Pekín-, y firmaron convenios en educación, explotación forestal y propiedad intelectual.
La visita de Wen supone el final de un periodo de tensión entre la Unión Europea (UE) y China, que tuvo su punto álgido con la anulación por parte de Pekín de una cumbre bilateral prevista el pasado 1 de diciembre en Lyon (Francia) a raíz de la decisión del jefe de Estado francés Nicolas Sarkozy, por entonces presidente del bloque europeo, de reunirse con el Dalai Lama.
«Hemos acordado celebrar una nueva cumbre muy pronto», aunque la fecha precisa aún no fue establecida, declaró el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, durante una conferencia de prensa conjunta con Wen, quien confirmó el compromiso.
Para Durao Barroso, la visita de hoy y los acuerdos alcanzados «confirman que la UE y China desarrollan una asociación estratégica cada vez más profunda, estrecha y completa».
De su lado, Wen Jiabao estimó que las relaciones entre ambas partes «avanzaban con algunos corchetes» y que su desarrollo constituía «una tendencia a largo plazo que no puede ser invertida».
Wen recordó que la Comisión Europea había efectuado una importante visita a Pekín en abril de 2008, justo después de la represión de las manifestaciones en el Tíbet que le habían costado a China críticas de la comunidad internacional.
En ese sentido, Durao Barroso dijo haber «tocado» las cuestiones de los derechos humanos y el Tíbet en sus discusiones con Wen Jiabao, como lo permite «una relación madura y profunda», sin dar más detalles.
El primer ministro chino evitó hablar del Tíbet y prefirió insistir en la necesidad de una cooperación reforzada con Europa frente a la crisis económica mundial.
«Creo que mientras China y la UE marchen de la mano, podremos superar la crisis financiera y atravesar este periodo difícil», aseguró.
Este espíritu de cooperación ante la crisis económica mundial fue confirmado por la comisaria europea de Relaciones Exteriores, Benita Ferrero-Waldner, que también se reunió con Wen.
«También ellos enfrentan grandes desafíos como el desempleo, la pérdida de puestos de trabajo. Y quieren trabajar en forma concertada con nosotros», declaró Ferrero Waldner.
«Hemos discutido de la situación económica y la importancia que tendrá en nuestras próximas reuniones», por ejemplo en el cumbre del G20 en Londres en abril, agregó de su lado el Alto Representante de la UE para la Política Exterior, Javier Solana, otro de los responsables europeos que se entrevistó con el líder chino.
La gira de Wen Jiabao por Europa ya lo llevó a Suiza -donde participó en el Foro Económico Mundial de Davos- y Alemania, además de Bruselas, e incluye a España y Gran Bretaña.
La Unión Europea (UE) y China acordaron hoy celebrar «muy pronto» una nueva cumbre bilateral, dos meses después de la anulación de un encuentro de ese tipo por la cuestión del Tíbet, anunció el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso.
«Hemos acordado celebrar una nueva cumbre muy pronto», incluso si la fecha aún no fue establecida, declaró Durao Barroso durante una conferencia de prensa conjunta con el primer ministro chino Wen Jiabao.
China había anulado la cumbre prevista con la UE el 1 de diciembre en Lyon (Francia) luego de que el jefe de Estado francés Nicolas Sarkozy, por entonces presidente del bloque europeo, hubiese anunciado que se reuniría con el Dalái Lama.