Legislativas se complican para Merkel


Angela Merkel, canciller alemana. FOTO LA HORA: AFP MICHAEL GOTTSCHALK

La canciller federal alemana Angela Merkel se negó hoy a cambiar de estrategia por el revés de ayer en dos comicios regionales que ha reducido sus posibilidades de formar un gobierno de derecha después de las legislativas del 27 de septiembre.


A tan sólo cuatro semanas para las elecciones más importantes de Alemania, Merkel puede tener motivos de preocupación. Los sondeos predicen que podrí­a abandonar a sus socios actuales, los socialdemócratas, para formar el próximo gobierno con los liberales del FDP. Pero los mediocres resultados de ayer hacen tambalear esta perspectiva.

La Unión Cristiano Demócrata (CDU) registró un retroceso considerable en dos regiones respecto a 2004: Sarre (-13 puntos porcentuales) y Turingia (-11,8 puntos), en las que perdió su mayorí­a absoluta, según los resultados provisionales.

Ni siquiera está claro que pueda participar en los gobiernos regionales de Sarre (fronteriza con Francia) y de Turingia (ex República Democrática de Alemania, RDA). Todo dependerá de las alianzas, y las negociaciones de coalición se anuncian largas y arduas.

Sin embargo en la región de Sajonia (ex RDA), donde también se celebraron elecciones ayer, la CDU logró mantenerse.

No cabe duda de que Angela Merkel sigue siendo muy popular, con un 62% de los alemanes que quiere que siga en su puesto; la pregunta es si el 27 de septiembre por la noche tendrá una mayorí­a clara junto con el FDP.

«Tenemos todas las posibilidades de ganar las elecciones legislativas y de formar un gobierno de coalición con el FDP. Creemos que es lo mejor para este paí­s», aseguró.

El FDP, en plena ascensión, dobló casi sus resultados con relación a 2004, algo notorio si se tiene en cuenta que hasta hace poco casi ni existí­a en la ex Alemania del Este.

La CDU, por el contrario, no hace más que perder votos en las elecciones, tanto locales, como regionales o europeas.

El politólogo Jurgen Falter considera incierta una coalición entre conservadores y liberales y opina que «el resultado será muy ajustado el 27 de septiembre». Lo mismo piensa su colega Oskar Niedermayer, quien asegura que el desenlace de las legislativas no está cantado.

Pero Merkel recalcó que no habí­a «absolutamente nada» que cambiar en la estrategia electoral de la CDU pese a las voces que se alzan, sobre todo en el FDP, pidiendo un cambio de orientación.

El rival de Merkel a la cancillerí­a, el ministro de Relaciones Exteriores socialdemócrata Frank-Walter Steinmeier, vio en los resultados de ayer una señal de que «este paí­s no querí­a una coalición negra-amarilla» (CDU-FDP).

Sin embargo el retroceso de los conservadores benefició muy poco al SPD (Partido Social Demócrata).

La que destacó fue la izquierda radical Die Linke, que se convirtió en la segunda fuerza polí­tica de Sajonia y Turingia y ganó 19 puntos respecto a 2004 en Sarre, donde, al igual que en Turingia, todo indica que habrá una coalición roja-roja-verde.

La derecha aprovechará sin duda para agitar de nuevo el espantajo «rojo». Y eso que el SPD descarta aliarse con la izquierda radical a nivel nacional por sus discrepancias en materia económica e internacional.