Le toca su turno al Ministerio Público y a los tribunales


francisco-caceres

El Sistema Penitenciario ha estado compitiendo por los últimos puestos de credibilidad y confianza de la población y para citar solo algunos ejemplos con el Congreso, con la Policía Nacional Civil, con los hospitales nacionales y hasta con el triste y deplorable sistema judicial con que vivimos. ¿Quién no sabía que el Capitán Byron Lima Oliva era el mandamás de la cárcel en donde cumplía una condena de 20 años? Directamente nunca le pregunté al presidente Pérez o al ministro López Bonilla si estaban enterados de esto y demás carroña que ha venido carcomiendo dicho sistema en el país, pero ahora veo que no lo ignoraban y que mantenían la inquietud sobre qué y cómo hacer para agarrarlo con las manos en la masa.

Francisco Cáceres Barrios
fracaceres@lahora.com.gt


Ahora, después de la captura realizada momentos antes de regresar del “permiso” auto recetado para irse a hacer un tratamiento dental, salta a la vista que se diseñó una estrategia para lograr el objetivo que antes manifesté. Indudablemente que tuvieron la suficiente paciencia para hacerlo, pues los pasos dados no fueron precipitados en ningún momento hasta demostrar a ojos de todo el mundo que no se trataba de  ningún inocente bebecito sino todo un mandamás que suponía tenerlas todas consigo.

    A los estimados lectores les consta que me cuento entre los primeros que exigía al primer mandatario y a su Ministro de Gobernación que utilizaran la mentada inteligencia de la que tanto hablaron durante su larga campaña electoral y hasta ahora, puedo decirles que los felicito, que esa es la clase de resultados que la población ha estado esperando desde hace rato para destapar y poner sobre el tapete toda la verdad de lo ocurre en el mal llamado “sistema” penitenciario. De ahí, que le toca al Ministerio Público y a los tribunales demostrar que todos vamos detrás del mismo objetivo, acabar con la corrupción y los malos manejos que traen al país en bancarrota.

    Pero señores funcionarios, aún hay más. Falta mucho por hacer. Con el ejemplo que ahora han dado, seguramente que nuestra población no se va a quedar tranquila, al contrario ahora, para empezar, tendrán que soportar la insistencia por la depuración total de la PNC; porque se compren los insumos para la salud pública a precios justos y dentro de un marco de completa honestidad y transparencia; porque la llamada bancada “oficial” sea la primera en el Congreso de dar buenos ejemplos, desde eliminar los menús a la carta, hasta reducir la enorme cantidad de personal que rodea a cada diputado, pero fundamentalmente que cada uno de ellos devengue tanto dinero que recibe puntualmente. Con la administración de justicia es punto y aparte. Ahora es cuando la Honorable Corte Suprema debe poner de manifiesto sus conocimientos, como su elevado rango y categoría profesional para eliminar de tajo todo aquello que lo contradiga.