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Lavezzi, quien llevará la camiseta con el número 11 con el club parisino, llegó la noche del domingo a la capital francesa y ayer cumplió el trámite del reconocimiento médico para firmar un contrato de cuatro años.

«Lo que me convenció para venir acá fue el proyecto del club y que puede seguir creciendo», dijo Lavezzi. «Cuando se habla de clubes como PSG, siempre se hablará de dinero, pero me interesa lo deportivo».

«Es un nuevo desafío y a mí me gustan los desafíos», añadió. «También quiero repetir lo que hice en Napoli y ganarme el cariño de la afición».

La venta de Lavezzi se fraguó durante varias semanas. El monto de 30 millones de euros fue divulgado por la prensa francesa.

El Napoli le dio las gracias al «Pocho» Lavezzi por su «importante aporte al club tanto en Italia como en Europa».

Lavezzi era uno de los «Tres Tenores» del Napoli junto al uruguayo Edinson Cavani y el macedenio Marek Hamsik.

Pero el argentino decidió irse cuando el club no pudo clasificarse a la Liga de Campeones de Europa. Rompió a llorar tras la conquista de la Copa Italia, en su último partido con el club, y tuvo que ser consolado por sus compañeros.

Lavezzi escribió una carta pública a los hinchas del Napoli y les agradeció el «profundo cariño» que le dieron en «cinco inolvidables años».

«Los adiós no son jamás fáciles y en este caso es aún más difícil y doloroso. Será extraño salir a la calle y no sentir el amor y la pasión incondicionales que siempre me han regalado», expresó Lavezzi.

«Fue una sucesión de pasión y emociones compartidas, un camino que recorrimos juntos, unidos por un mismo sentimiento», añadió en la carta difundida en su página web personal.

También recordó a Diego Maradona, jugador que en su tiempo en el Napoli dejó una «marca indeleble». «Para cada futbolista argentino, Napoli no es un ‘club más»’, afirmó.

«Apostamos juntos y nunca perdimos la confianza mutua: reímos, lloramos, sufrimos y gozamos, y entre todos lo logramos», concluyó Lavezzi.