Me pareció de buena fe lo que en su día propuso, y hasta me conmovió, pues como dije en ese momento nadie, pero ni en sueños había pensado semejante cosa, pero, creo que no sólo yo me alegré al escuchar tan agradable noticia.
     Como dicen en las películas, es tan bonito como para ser cierto, y así resultó, en los mítines y anuncios que hicieron, dijeron y juraron que iban a ayudar al pueblo y no hacer las cosas mal como lo habían hecho los anteriores gobiernos, y parece que se les olvidó ese juramento porque no llevan ni cuatro meses y ya están haciendo lo que supuestamente no harían y, además en como recetarse un jugoso aumento de sueldo.
     Esto lo dijo el Alcalde de Mixco, Otto Pérez Leal, que por lo visto no es tan leal con los vecinos y con todos los guatemaltecos que por alguna razón votaron por él.
     Señor Leal, es cierto que es su trabajo y como tal merece un sueldo, pero, no le parece que lo que pensaba hacer es un insulto a los que en usted cree. Dígame, señor Leal, que pasaría si en vez de usted haya quedado otra persona en ese puesto y hace lo mismo, seguro le pediría como en este momento lo hago yo, y porque no decirlo muchas personas que abandone ese absurdo, porque si lo hace estaría quedando mal con las personas que votaron por usted, que creen en usted y que de usted esperan muchas cosas buenas como las que ofreció en campaña y también estaría manchando su nombre.
     Escuché en las noticias que declinó el hacer semejante atropello, y le digo una cosa, todos se lo vamos a agradecer porque no sólo se están elevando los precios de la canasta básica y la verdad con ese jugoso aumento que pretendía, bien se puede utilizar para las personas que están necesitando de un techo, o por qué no de un trabajo, piense en cómo hacer el bien pero para la gente no para usted, si usted ya tiene lo suficiente para poder vivir bien junto a su familia.
     Lo que  usted haga, piénselo bien porque recuerde que los que están bajo sus órdenes son como una familia si ven al padre hacer tal o cual cosa ellos quieren imitarlo, ya usted no le gustaría que ellos se receten salarios que no están autorizados, y los demás alcaldes podrán pensar que también pueden hacer lo mismo.
     Hagan su trabajo, cobren su salario, pero no se manden porque si lo hacen van a quedar peor vistos que el gobierno anterior y no tendrán ni la menor capacidad para juzgar ni al anterior o los próximos gobiernos por venir.