En el estudio del Catecismo y la doctrina cristiana, de la Iglesia Católica, se hace ver que la primara guerra que hubo, Antiguo Testamento, fue cuando Luzbel, Luz bella, se rebeló contra Dios, pero las fuerzas militares leales comandadas por el Arcángel Gabriel, (¿por qué en el cielo tiene que haber ejércitos bélicos?), que ha de haber sido el Jefe del Estado Mayor Celestial, se puso pilas y con sus fuerzas sacaron a puros planazos al alzado en armas, (espadas), que supongo ha de haber sido algo así­ como el Ministro de la Defensa Celeste, y en algo no estuvo de acuerdo con los mandatos de Dios. Al salir éste derrotado, que ha de haber sido también Arcángel, cambió su denominación en el RENAP y se volvió Lucifer, alias el diablo, demonio, Satanás, el maligno, el dios sea con nosotros, etc., y como no fue sólo él sino con toda su gente, se volvió una de todos los diablos. Así­ pues, la primera batalla armada es divina. Pero este ex arcángel se convirtió en guerrillero, y desde entonces viene dándole quehacer a Dios, que no ha podido o no ha querido someterlo. í‰l sabrá por qué. Lucifer tiene cuartel general que es el infierno, a donde van a hacerse churrasco los que contravienen las leyes divinas.

Las guerras desde entonces son endémicas y se han producido a través de los tiempos (hasta en la actualidad). En la breve Historia del Mundo de H.G.Wells, colección Zig Zag, 1960, se ve que las guerras han sido por ambición expansionista así­ como por divergencias religiosas. Dice que con anterioridad al año 4 mil o 5 mil antes de Jesucristo, las tribus primitivas «amaban a los hombres y guerreaban».

Se relata también que la «ciudad sumeria de Erech pretendí­a ejercer cierta autoridad desde el Golfo Pérsico hasta el Mar Rojo».

Y sigue: «Teglar Felaser III conquistó Babilonia, (no ha de haber sido con Tor Trix), y fundó el nuevo imperio asirio. Sargón II, sigue, dotó al ejército de armas de hierro y deportó a los israelitas. Ensarbidón tomó a Tebas en Egipto. Nemo de Egipto derribó a Josí­as, rey de Judá en la batalla de Megido. Ciro conquista Croesus. Refiere esta historia que en 146 se produjo la destrucción de Cartago. Los chinos conquistan el valle de Tarim. En 89 los italianos obtienen la ciudadaní­a romana. Más adelante relata que Pompeyo conduce las huestes romanas hasta el Caspio y el Eufrates. Julio César derrota a Pompeyo en Farsalia, después muere asesinado. Augustus César gobierna hasta el año 14 después de Jesucristo. Y así­ sigue la lista de guerras y asesinatos.

En otro relato guerrero, esta Breve Historia del Mundo apunta: «En 1898, Alemania se apoderó de Kian-Chau, en China; Inglaterra contestó apoderándose de Wei-hai-wei, y, en el año siguiente, los rusos tomaron posesión de Puerto Arturo. Toda la China ardió en odio contra los europeos. Hubo matanzas de europeos y chinos convertidos al cristianismo, y en 1900 un ataque y sitio de las legiones europeas en Pekí­n.» Habla también Wells, del fracaso de la Liga de las Naciones Unidas. De la edad de los armamentos europeos y la Gran Guerra de 1914 y 1918 y de la Segunda Guerra Mundial.

Casi finalmente, expresa Wells, que «Apenas si se exagera al decir que en la actualidad, como especie, la humanidad está demente y que nada es más urgente como que recobre el control mental de sí­ misma». Parece que fuera hoy, ¿verdad?