LAS FAVORITOS CUMPLEN


El mexicano Karin Garcí­a durante el clásico mundial de Béisbol en el Estadio Foro Sol de México.   FOTO LA HORA: AFP Antonio LEVI

Transcurrida la primera semana del Clásico Mundial-2009 de béisbol, la lógica se va imponiendo en un calendario «asesino», donde el desajuste de los bates y brazos millonarios de las Grandes Ligas, y la buena forma de asiáticos y cubanos, ha provocado algunas sorpresas y hechos anecdóticos.


El pitcher Jorge Luis Vera #20 de Cuba hace un lanzamiento en un juego contra Sudáfrica. FOTO LA HORA: AFP  Kevork Djansezian

El sistema de doble eliminación implantado en esta edición parece tener alguna lógica, pese a las crí­ticas, enviando de regreso a casa a las selecciones más débiles como China, Taiwán, Sudáfrica y Panamá, y con una dosis de sorpresa a la de Canadá.

En el grupo asiático con sede en Tokio, Corea del Sur, campeón olí­mpico, y Japón, defensor del tí­tulo, avanzaron según pronósticos y ya entrenan en San Diego (California) en espera de sus otros dos acompañantes para los cuartos de final que se jugarán en esa ciudad (marzo 15-19).

Los compañeros de viaje de los asiáticos en ese cuadro saldrán del grupo que se juega en Ciudad de México, donde Cuba parece no tener problemas para avanzar, dada la demostración que dio en su primer partido, y la flojera del anfitrión México, apaleado por Australia en su debut.

La «Aplanadora Roja» de los cubanos desató festival de jonrones para vencer a Sudáfrica 8×1, con cifra récord de seis cuadrangulares, para superar la marca de cuatro estacazos en un partido, impuesta por República Dominicana ante Venezuela en el primer Clásico (2006).

El desempeño del equipo antillano cobró visos de anecdótico, cuando el lí­der cubano Fidel Castro fustigó los «descuidos» del conjunto que dirige Higinio Véliz, y llamó la atención a tres jugadores que cometieron errores mentales en el partido.

«(Héctor) Olivera y (Eduardo) Paret se dejaron sorprender los dos, en primera base, y Michel Enrí­quez regaló un out con el avance irracional a segunda, después de batear hit, agitado tal vez demasiado en el corrido de base por la dirección del equipo», opinó Castro, de 82 años, en su nuevo papel de crí­tico deportivo.

Furibundo fanático de los deportes, y especialmente del béisbol, deporte en el que incluso llegó a realizar en sus años universitarios una prueba para ingresar a una franquicia de Grandes Ligas, los señalamientos de Castro deben estar pesando como una lápida sobre el equipo, y podrí­an afectar su desempeño futuro.

Las sorpresas del evento han corrido a cargo de Holanda, Australia e Italia, novenas que aún luchan por su pase en grupos donde se les consideraban meras comparsas.

Los «tulipanes» del manager Rod Delmonico vencieron 3-2 al fuerte trabuco de República Dominicana en la fecha inaugural del Grupo D, y estuvieron a punto de dar el palo al otro favorito de la llave, Puerto Rico.

Los holandeses mantuvieron en vilo a toda la isla boricua durante ocho entradas, en que iban ganando 1×0, hasta que los bates locales pudieron descifrar el pitcheo europeo y darle vuelta al partido para vencer 3×1.

Australia propinó el primer nocaut del torneo, con paliza de 17×7 a México en la llave B, mientras que Italia sacó del Clásico a la representación de Canadá, humillada 6×2 en su propio patio de Toronto.

Como están las cosas, ya aseguraron boletos a segunda ronda los equipos de Estados Unidos (Grupo C) y Puerto Rico (D), Corea del Sur y Japón (A), y se espera que el próximo invitado al baile de cuartos de final sea Cuba por la llave B.

Para consuelo de los equipos eliminados, se van a sus casas con 300 mil dólares en la bolsa, premio establecido por sólo participar en la primera ronda.

La mitad de esa cifra será repartida entre los integrantes de cada selección -jugadores y técnicos-, y de acuerdo a como corren los tiempos, no está mal ganarse 4.421 dólares por sólo seis dí­as de trabajo.