Las economí­as latinoamericanas miran con optimismo y cautela hacia 2010


Como nunca antes en el pasado, América Latina enfrentó con entereza la crisis sin precedentes que sacudió al mundo en 2008 y ahora mira a 2010 con una mezcla de optimismo y cierta cautela.


La crisis truncó seis años de crecimiento en la región, que saldará 2009 con una retracción de 1,8%%, según el último informe de la CEPAL, que por el contrario prevé un avance de 4,1%% para Latinoamérica en 2010.

América Latina «sufrió un impacto sustancialmente inferior a lo que sucedió históricamente frente a otras crisis internacionales en los paí­ses emergentes, porque estuvo menos expuesta al mercado financiero internacional y al flujo de capitales», estimó Mariano Lamothe, economista jefe de la consultora argentina Abeceb.

Además, los gobiernos respondieron con agilidad y aplicaron un variado conjunto de polí­ticas económicas, como en los casos de Brasil y México que bajaron la carga impositiva en algunos sectores para estimular el consumo.

De todas formas, el continente sí­ sintió el golpe de la reducción de la demanda internacional, la fuerte salida de capitales y la caí­da de los precios de las materias primas.

La CEPAL espera resultados negativos este año en México (-6,7%%), Paraguay (-3,5%%), Venezuela (-2,3%%), Chile (-1,8%%), Ecuador (-0,4%%) y la mayorí­a de los paí­ses centroamericanos.

Pero a grandes rasgos, los planes gubernamentales dieron buenos resultados y ningún paí­s latinoamericano entró en una crisis económica profunda. El gran interrogante que surge ahora es si la recuperación que se viene registrando será sostenida y sólida.

«Después de una crisis como la que tuvimos no se puede decir un año después que no existe peligro, pero fue una crisis especial para los paí­ses emergentes (…) porque pasó cuando algunos paí­ses estaban en una situación particularmente buena», señaló la economista Marí­a Antonieta del Tedesco Lins, del Instituto de Relaciones Internacionales de la Universidad de Sao Paulo.

En 2010, los paí­ses latinoamericanos mostrarán un comportamiento desigual, donde Brasil, Chile y Perú tienen mejores perspectivas, con previsiones oficiales de crecimiento entorno al 5%%, mientras que Uruguay prevé 4%%.

«En 2010 se ve a Brasil liderando la región por tamaño y economí­a doméstica, con Uruguay recuperándose, Chile dependiendo de la evolución del precio del cobre, Argentina con un 4%% de previsión de aumento de la economí­a, y Colombia con crecimiento más lento, igual que México», estimó el argentino Lamothe.

La economí­a mexicana registrará una recuperación mucho más lenta por estar directamente relacionada al rendimiento de la estadounidense, concordó José Luis Calva, del centro de Investigaciones Económicas de la UNAM.

El 80%% de las exportaciones de México están destinadas a Estados Unidos, cuyo crecimiento todaví­a no se ha consolidado. Por ello, la segunda economí­a de América Latina deberí­a avanzar en 2010 en torno al 3%%, según las estimaciones oficiales.

A pesar de esas buenas proyecciones, en el caso de una nueva crisis en el corto o mediano plazo, serán Argentina y Bolivia los primeros paí­ses latinoamericanos en verse afectados, según el economista Manfred Back en Sao Paulo.

«Argentina ya vení­a con una trayectoria mala antes de la crisis (…) no viene lidiando bien con la economí­a, pero no por la crisis» sino por temas polí­ticos internos y porque depende mucho del campo, subrayó.

A su vez, la dependencia de Bolivia de su gas natural y Venezuela de su petróleo los hacen más vulnerables a las fluctuaciones del mercado internacional y al desmoronamiento de precios.

Pero en sí­ntesis, los principales indicadores económicos están mostrando tendencia a la recuperación para el próximo año, lo que anima a los gobiernos y a algunos analistas que plantean que lo peor de la crisis habrí­a quedado atrás.

Sin embargo, Del Tedesco prefiere mantener cierta cautela: «la crisis no acabó completamente pero estamos en una fase bastante favorable».