La cantidad de muertes diarias en Guatemala se recopila de forma cualitativa y cuantitativa, y se compara con indicadores que se observan a nivel internacional y con base al cual se hacen diversos análisis sobre la situación del país. Pero del otro lado del dolor que deja el fallecimiento de una persona, existe gran cantidad de ofertas de servicios que se hacen cargo de las últimas gestiones para realizar una digna despedida del ser querido y también de la sepultura.

Uno de los servicios que parece haber despegado durante los últimos años, derivado de la cantidad de muertes diarias que ocurren en el país por motivo de la violencia, es el que tiene que ver con las funerarias y los camposantos, que irremediablemente van de la mano.

Las funerarias, además del servicio de capilla que ofrecen, que trata de brindar un área para que los familiares de la persona que falleció, sus amigos y conocidos hagan gala de homenajes, oraciones o simplemente acto de presencia, han diversificado su gama de ofertas en cuanto a  los servicios que ofrecen.

Algunos usuarios de los servicios funerarios suelen creer que en esas empresas se puede adquirir solamente tiempo de estancia para realizar el velorio del cuerpo de una persona; sin embargo, las empresas que se dedican a ese tipo de actividad económica, han ampliado su gama de ofertas y algunas cuentan hasta con su propio cementerio. O, como diría Sergio Valenzuela, de Funerales Mancilla, las empresas que tienen camposanto normalmente cuentan con su funeraria.

La oferta actual de algunas empresas funerarias abarca el tradicional servicio de capilla, que incluye las gestiones legales que deben realizarse, como el asentamiento de la partida de defunción, que se hace de acuerdo al motivo de la muerte y por ello en diferentes entidades. El servicio abarca la preparación del cuerpo del fallecido, que lleva varios procesos para que se pueda velar por varias horas o incluso días. También, el precio que se pague, lleva incorporado el costo del cofre, que usualmente es el elemento que eleva el costo, algunos alimentos como sándwiches, café y consomés, además de traslados de un grupo de personas –generalmente los dolientes más cercanos– hacia el camposanto.

Estas empresas, dependiendo de los precios y del sector de la sociedad al que atiendan, también han incorporado servicios de cremación del cuerpo, y cuentan con equipo de incineración adecuado para la realización de ese tipo de actividad.

Dependiendo de las circunstancias de la muerte de la persona, a los dolientes les lleva tiempo aprender a sobrellevar el dolor que deja la partida de un ser querido y en ocasiones incluso es indispensable atención psicológica. En ese sentido, las empresas funerarias han incluido en parte de sus paquetes ese tipo de atención a sus clientes, pues según indicó una fuente de una reconocida funeraria en la zona 9, en esa empresa se prestan las atenciones necesarias para que los apesadumbrados puedan continuar con su vida de una forma humana y llevando el luto de manera adecuada.

Uno de los servicios más económicos serían los que se prestan a domicilio, pero el inconveniente, según Valenzuela, de Funerales Mancilla, es que además de que la familia lleva toda la carga del momento, debería estar pendiente de la atención a todas las personas que acuden para acompañar durante el duelo, y eso podría causar más penas que ayuda.

LOS MÁS CAROS
La mayor parte de clientes con que cuenta Mancilla adquirió su paquete de servicios funerarios de manera anticipada, dijo Valenzuela, previendo los hechos y dejando de lado la improvisación al momento de alguna emergencia de ese tipo. Es decir, que lo fueron haciendo a través de pagos mensuales, que puede ser hasta por 50 cuotas, sin recargos, indicó.

Existen varios paquetes para la adquisición de servicios funerarios, pues los hay hasta con cementerio incluido, pero las familias que al momento de la emergencia no cuentan con un espacio en un camposanto privado, la funeraria puede hacer las gestiones para “conseguir” un lugar que albergue el ataúd en un cementerio público.

A criterio de Valenzuela, aunque para ninguna persona es cómodo hablar de servicios funerarios y camposantos cuando no parece haber motivo para hacerlo, es mucho más económico hacer las previsiones del caso, que tomar decisiones en momentos difíciles que pueden resultar en un costo mayor.

Una de las ventajas que el colocador de servicios destaca, es que los contratos funerarios son cedibles. Es decir, que el propietario puede utilizarlo para un familiar o incluso para un amigo. Además, el valor del contrato no se deprecia, pues cuando ya está cancelado, se puede exigir el servicio hasta 15 años después. Esta característica es algo que también señala una funeraria de la zona 9 en su sitio Web, pues un servicio que se compró en unos Q100 hace algún tiempo, y que ahora puede costar hasta Q15 mil, puede ser utilizado actualmente sin pagos adicionales.

Uno de los servicios que podría considerarse de precio elevado, es el que una funeraria ofrece bajo el contrato denominado Premier, que puede costar poco más de US$7 mil 900 para un paquete de dos servicios y uno del mismo estilo puede rebasar los US$4 mil 300. En este caso, la elección del ataúd es libre. También hay otros servicios más económicos con una amplia gama de elección de cofres y otros más que limitan el número de opción de ataúdes a ocho.

Por aparte, el servicio de cremación, que consiste en reducir a cenizas el cuerpo de una persona, mediante la aplicación de calor, también puede adquirirse por contrato doble, que puede rondar, en una funeraria catalogada como de prestigio, poco más de US$2 mil 200, para un contrato de dos servicios, y uno individual por US$1 mil 269. Estos últimos dos servicios también pueden cancelarse hasta en 48 cuotas.

CAMPOSANTO
Otro de los elementos que debe tenerse en cuenta para prevenir desatenciones al momento de la partida de un ser querido, es el lugar donde el cuerpo se albergará para la posteridad. Y solo algunas funerarias cuentan con su respectivo cementerio, como puede ser el Cementerio Las Flores, que tiene su propia capilla y centro para celebrar ceremonias religiosas o Funerales Reforma, que cuenta con el cementerio privado La Villa de Guadalupe.

Por aparte, el Cementerio Las Bouganvilias, cuenta con varios segmentos para inhumaciones dentro del recinto como jardines, nichos, osarios, entre otros. Para el área de jardines, hay espacios adentro de la tierra que cuentan hasta con tres áreas para criptas. También hay sitios para osarios privados. Los precios en este caso pueden variar, pero según indica la oficina administrativa del lugar, también se pueden hacer contratos para pagos hasta en 20 meses sin recargos ni intereses para una propiedad. Lo único que se puede adicionar, es el pago del servicio por cada inhumación.

Para el área de los nichos, en cada camposanto los costos varían acorde a la ubicación que se tenga. Los precios más altos pueden encontrarse para los nichos que se sitúan más próximos y al alance para adornar. Los montos más bajos son para los nichos que están a mayor distancia del suelo, y para los que se necesitaría auxilio de varios instrumentos para colocar los adornos florales.
 
Para el caso de la instalación de un cementerio deben llenarse varios requisitos, entre ellos, incluso podría estar un estudio de impacto ambiental, debido al manejo que debe hacerse de los cuerpos y su estado posterior. Se debe seguir normas para el sellado de las criptas y de los nichos.

LOS “CALAQUEROS”
En algunas ocasiones, ocurren situaciones que podrían rayar en la insensibilidad por la muerte de una persona y que solamente se busca ganar dinero con el fallecimiento y el dolor de quienes han perdido a un familiar.

Hay trabajadores de algunas funerarias que podrían catalogarse como de bajo costo, que buscan personas fallecidas en las calles u hospitales, o que estén a punto de morir y de esa forma obtienen datos para contactar a la familia y ofrecer sus servicios. Dependiendo de la situación, si la persona murió en un accidente o por arma de fuego, en el momento en que la familia se entera y visita el lugar del hecho, los “calaqueros” pueden inmiscuirse entre ellos y proponer su oferta. Preguntar si cuentan con un contrato.

También puede ocurrir lo contrario. Un cliente de servicios funerarios, consultado por La Hora, comentó que incluso los “calaqueros” visitan las salas de hospitales donde algunos pacientes están desahuciados, pues incluso han llegado incluso a tomar el pulso de un paciente y calcular el tiempo que le resta de vida. Ya con eso, saben de antemano a qué familiar avisar y ofrecer el servicio funerario. Según la fuente, estos personajes podrían tener contactos al  interior de los hospitales, con los cuerpos de socorro como los Bomberos y hasta con la Policía, quienes les estarían informando de lo que ocurre.

Un “calaquero”, contactado por La Hora, explicó que efectivamente esa es la forma de trabajar en su gremio, pero lo justifica diciendo que ya ni los hospitales se ocupan de avisar a los familiares de los pacientes al momento del deceso.

Un funeral con este tipo de personas podría llegar a costar unos Q4 mil, con todos los servicios, incluido el cofre y la carroza fúnebre. Sin embargo, según el usuario consultado, estas empresas, catalogadas como pequeñas, también tienen contratos con algunos clientes, pero debido a la poca capacidad que tendrían, se llegaría al extremo de que el propietario del negocio sea quien haga todas las gestiones legales, prepare la alimentación y hasta quien conduzca el vehículo fúnebre, por no decir que también es quien prepara el cuerpo del fallecido, y por ello llegar a cobrar más al momento en que tengan que dar cumplimiento al contrato, lo que haría que se encareciera el servicio, pues esas empresas no contarían con fondos de previsión.