Las academias de la lengua presentan el Diccionario de Americanismos


El Diccionario de Americanismos, esfuerzo conjunto de las Academias de la Lengua de Latinoamérica. FOTO LA HORA: ARCHIVO

Los presidentes de las 22 academias de la lengua española presentaron ayer, en Madrid el Diccionario de Americanismos, una nueva obra «fruto de la polí­tica lingí¼í­stica panhispánica» impulsada en la región desde hace una década.


Se trata de «una nueva obra fruto de la polí­tica lingí¼í­stica panhispánica impulsada desde hace más de una década» por las 22 academias de los paí­ses y territorios donde se habla español, indicó la Real Academia Española (RAE) de la Lengua, en cuya sede de Madrid se presentó la publicación.

Su presentación estaba prevista en marzo en Chile, en el marco del V Congreso Internacional de la Lengua Española, en Valparaí­so, pero se anuló debido al terremoto de 8,8 grados y posterior maremoto que golpeó el centro y sur de Chile el 27 de febrero, que dejó 521 muertos y enormes daños.

Este nuevo diccionario de las academias del español incluye «70.000 voces, lexemas complejos, frases y locuciones y un total de 120.000 acepciones», además de «una serie de apéndices, entre ellos los dedicados a las etnias y lenguas indí­genas vivas de Hispanoamérica, a los gentilicios americanos y a las siglas hispanoamericanas de más uso», explicó la RAE en un comunicado.

Recoge términos que no se utilizan en el español general y que son de uso especí­fico de una o varias regiones americanas, y que suponen un 10% del idioma, según el director de la RAE, Ví­ctor Garcí­a de la Concha.

Incluye palabras heredadas de lenguas originarias de América, castellanismos arcaicos que llegaron durante el Descubrimiento y cuyo uso se ha perdido en España pero no en América, criollismos morfológicos y palabras castellanas que allí­ tienen un significado que no tienen en el español general.

«Degreñao (despeinado en República Dominicana), «déiof» (dí­a libre en Estados Unidos) o «degenereque» (degenerada en Chile) son algunos términos que lo integran.

Aunque el diccionario empezó a elaborarse hace ocho años, los orí­genes del proyecto remontan al siglo XIX, cuando se fundaron las primeras academias americanas del español.

En 2002 se dio el pistoletazo de salida en el XII Congreso de la Asociación de Academias de la Lengua Española, celebrado en Puerto Rico.

El diccionario es el «fruto granado de la polí­tica lingí¼í­stica panhispánica», «pionero en muchos aspectos», y «obra de las veintidós Academias asociadas en su trabajo al servicio de la unidad del español sin menoscabo de su rica y fecunda variedad», explica el presidente de la Asociación de Academias de la Lengua Española (ASALE) y director de la RAE, Ví­ctor Garcí­a de la Concha, en la presentación del libro.

Además, la elaboración de esta obra «ha impulsado a la vez la preparación de diccionarios nacionales de cada uno de los paí­ses», destaca.

Los académicos se basaron en «los casi 150 diccionarios de americanismos (generales y nacionales) publicados desde 1975 hasta la fecha» y en «algunos inéditos aún», explicó el coordinador y director de la obra, Humberto López Morales, secretario general de la ASALE.

Además tuvieron en cuenta 102 millones de registros aportados por todos los paí­ses.

El Diccionario de Americanismos engrosa la lista de las «obras panhispánicas» realizadas por la Asociación de Academias de la Lengua Española: el Diccionario, la Ortografí­a, la Gramática y el Diccionario Panhispánico de Dudas.