Con el programa Pro-Rural «se busca mejorar integralmente las condiciones de vida de las familias del área rural a través de proyectos productivos, asegurando la sostenibilidad de los recursos naturales y la conservación del medio ambiente», afirmó el coordinador de la Comisión Nacional de Desarrollo Rural, Roberto Dalton.

El funcionario, amigo personal del presidente ílvaro Colom y empresario dedicado a la comercialización de fertilizantes y agroquí­micos en el paí­s, sostuvo que ya trabajan en la identificación de los proyectos productivos que se adapten a las necesidades y microclimas de cada región.

Para este año, Pro-Rural trabajará en los 46 municipios que el gobierno definió como los más afectados por la extrema pobreza, mientras que en 2009 desarrollarí­a proyectos en 125 de los 333 que conforman el territorio guatemalteco.

«No es un paternalismo. No son regalos, ni son subsidios generalizados, porque eso no es sostenible. Es solidaridad hacia los más necesitados, es acceso al crédito para que adquieran sus insumos, es un primer empujón que necesitan nuestros compatriotas más necesitados», acotó Dalton.

El funcionario explicó que el programa se subdivide en siete áreas básicas: maí­z, café, hortalizas, actividad pecuaria, turismo, artesaní­as y energí­a.

«Todas las áreas están encaminadas a buscar el desarrollo de las comunidades más pobres del paí­s, pero con proyectos sostenibles que garanticen que los habitantes contarán con las herramientas necesarias para producir y comercializar sus productos», destacó.

El presidente Colom señaló que «Pro-Rural dará la vacuna más efectiva para combatir la pobreza, que es acceso a la tecnologí­a, acceso a la productividad económica. Estoy convencido de que el desarrollo rural no es sólo la agricultura, pues Guatemala tiene un gran potencial enfrente», destacó.