El cáncer de mama es la principal causa de muerte de mujeres entre los 35 y 64 años en América Latina, seguida por la mortalidad provocada por el cáncer de cuello uterino o de cérvix, según la Organización Panamericana de la Salud.

De acuerdo con la OPS, el cáncer de mama, en América Latina, ocupa los dos primeros lugares de incidencia y mortalidad por tipo de cáncer en la mujer, ya que hasta el año 2000 se reportaron cerca de 90 mil casos provocados por este tipo de cáncer.

Campaña de prevención

Hoy dio inicio la Campaña Nacional para Prevenir el Cáncer de Mama, impulsada por la Liga Nacional Contra el Cáncer.

Las actividades están orientadas a la detección temprana del cáncer de seno, tanto en mujeres como en hombres, pese a que por 200 casos diagnosticados de mujeres únicamente se reporta uno en hombres, según el médico Ernesto Morales.

La jornada médica de diagnóstico de cáncer de mama inició hoy y está planificado que concluya hasta el 31 de octubre, en las instalaciones de la Liga Nacional Contra el Cáncer ubicadas en la 6a. Av. 6-58, zona 11.

El galeno indicó que en la jornada de diagnóstico se incluye consulta del paciente y la mamografí­a o en su defecto un ultrasonido mamario, por un costo de Q100.00.

Morales mencionó que el examen de mamografí­a está orientado principalmente a mujeres mayores de 40 años, mientras que el ultrasonido se recomienda para personas menores de 40 años.

De acuerdo con el doctor, cada año se incrementan las consultas y debido a este comportamiento se hace necesario extender la temporalidad de la jornada hasta diciembre. Se espera la recepción de unos 8 mil pacientes.

Riesgos

Las mujeres que no han tenido hijos o que los han procreado tarde, pudieran estar más vulnerables a padecer la enfermedad, así­ como las mujeres cuyos perí­odos menstruales comenzaron cuando eran muy jóvenes o que tuvieron una menopausia tarde.

Adicionalmente, la dieta también puede representar un factor relevante como elemento de riesgo, ya que las mujeres que se alimentan con una dieta rica en grasas tienen una probabilidad relativamente mayor de padecer cáncer de mama en comparación a aquellas que se alimentan de forma más saludable.

Otro aspecto que influye en el riesgo de padecer cáncer de seno, es la obesidad y el alto consumo de alcohol de forma regular. En cuanto al estrés, no se ha comprobado que el aumento de éste tenga algún efecto en la incidencia de la enfermedad.