La polémica cantante Lady Gaga admitió que estuvo a punto de morir por su fuerte adicción a la cocaína, la cual consumía en grandes cantidades.
La cantante también reveló que su padre la ayudó a alejarse de esa droga, que la orilló a casi perder la vida.
La intérprete, de 23 años, señaló que inhalaba cocaína por largos periodos en su departamento de Nueva York, pero con el apoyo de su papá regresó a una vida normal.
Gaga explicó que al ser rechazada de un curso de música en la Universidad de Nueva York, su mal hábito incrementó.
Por otro lado, la artista aceptó que estar bajo los efectos de la cocaína la ponían muy nerviosa.