Actriz de origen canadiense Pamela Anderson se ha abierto hoy paso a manotazos contra fotógrafos y camarógrafos que la asediaban a su llegada a Santiago de Chile, adonde ha viajado para participar en un programa de televisión. La rubia y curvilínea protagonista de Los vigilantes de la playa se ha enojado por la gran cantidad de cámaras que la enfocaban a la salida del aeropuerto de Santiago, al parecer porque tras un largo vuelo desde Los Angeles (EE.UU.) no se sentía preparada para posar.
La ex conejita de Playboy ha aparecido despeinada, con medio rostro tapado por enormes gafas oscuras y sin maquillaje, cuando ha salido acompañada por los siete guardaespaldas que ha pedido para su estancia de dos días en Chile, que han sido reforzados por dos guardias del aeropuerto. Sin embargo, los custodios no han podido controlar al grupo de cámaras, fotógrafos, periodistas y curiosos que se habían agolpado a la salida y la actriz, enojada, se ha quejado de que la estaban aprisionando.
En un momento dado, Anderson, que miraba hacia el suelo la mayor parte del tiempo, ha visto las cámaras demasiado cerca y ha comenzado a lanzar manotazos hacia adelante y a derecha e izquierda para tratar de liberarse del acoso, hasta que ha logrado subir a la limusina y partir hacia el centro de la ciudad. Anderson, de 42 años, está en Chile para participar en el programa El Hormiguero, del Canal 13 de Televisión.