Hemos investigado alrededor de 15 familias que sufren este problema y la verdad que urge que los derechos de la mujer tengan presencia en casos donde la ama de casa o los hijos son sujetos a humillaciones de padres violentos que no respetan la integridad de la persona, en su caso, la esposa o los hijos. Hay unos casos, donde conversamos con la señora o los hijos y les hice la observación de que acudan a los derechos de la mujer y les di la dirección para que acudan a ayuda familiar, ya que esta clase de violencia tan irreparable cuando el sujeto en su salvaje comportamiento, deja huella que ya no se puede borrar, aún queda la esperanza de acudir a estas instituciones donde se le da protección con todo su derecho. Lamentablemente, hay casos donde la mujer por temor no denuncia los agravios a que se ve sometida por el padre de familia y prefiere callar y seguir soportando una vida que al final puede terminar con una muerte debido a los golpes a que se ve sometida, máxime cuando el tipo anda con tragos en la cabeza, ya que pierde muchos de sus sentidos y un golpe en una parte sensible del cuerpo, puede quitarle la vida a la mujer o algún pequeño hijo. Da malestar saber que en cierto lugar la pobre señora no puede ni salir de casa, solo a comprar los alimentos y tiene prohibido hacer amistades, por supuesto que esto es parte de la violencia del sujeto, ya que con eso no pone en alerta a un vecino para que se entere de cómo dejó a su señora luego de una paliza, cuando la señora sale a la calle, toda golpeada en el rostro, se sabe que el salvaje la golpeó brutalmente y ella se queda callada. Es necesario que la mujer haga estas denuncias que le favorecerán y que contara con ayuda psicológica que al final hace si el marido las recibe, que cambie de actitud. Pero mientras siga el silencio, esto puede llegar a casos fatales. En muchos de estos actos violentos, los hijos se dan cuenta y cuando tratan de defender a su madre, ellos también reciben los golpes. Hemos visto casos de niños que hacen las denuncias y con ello, el ambiente familiar sufre un gran cambio, porque se le hace conciencia al padre y este cambia de actitud, salvando al hogar que es la unión de la familia.

En otros casos, la mujer no permite que se le diga nada, ya sea por temor o porque se le condene al cabeza de hogar. Aquí­ la situación sí­ es bastante difí­cil, no deja quien puede acusar de ser maltratada, que se hagan investigaciones o que se le aconseje, metiendo en problemas a quien tiene la intención de ayudar.

Es muy necesario que la Defensorí­a de la Mujer logre contactar casos donde la mujer es maltratada y no hace la denuncia, que ellos como institución de protección, logren entrar en estos casos, ya que se podrí­a solucionar miles de situaciones donde la mujer sufre de violencia intrafamiliar, es bastante difí­cil en estos casos, lo comprendo, pero si se puede hacer algo para ayudar a quienes por temor no dicen nada.

Da bastante pena y coraje ver a una mujer golpeada y en muchos casos cuando en las noticias sale una ama de casa muerta por la brutalidad con que fue atacada porque son casos que si la señora hubiera acudido a las instituciones de protección a la mujer, se hubiera salvado y no dejar a sus hijos en orfandad por la violencia intrafamiliar.

En Guatemala son miles los casos de violencia intrafamiliar que se viven y que a cada momento están siendo golpeadas las mujeres por hombres que necesitan ayuda psicológica, pero que al no tener orientación sobre ello, continúa esta salvaje actitud que ha dejado muchos hogares desintegrados y en otros niños en orfandad.