Gran decepción ha causado en la población guatemalteca, conocer los planes de Salud Pública y Asistencia Social de los dos candidatos presidenciables, ílvaro Colom y Otto Pérez Molina, publicados en la página 6 del matutino elPeriódico correspondiente al viernes recién pasado, donde ambos coinciden en que la administración de los servicios de salud serán «concesionados» a empresas particulares.
Por su parte el Partido Patriota propone que las compras de medicinas sean hechas por volumen en conjunto con el IGSS y el MINISTERIO DE LA DEFENSA. Ahora nos preguntamos: ¿Y qué tiene que ver el Ministerio de la Defensa en la compra de medicinas, cuando esto es un asunto correspondiente al Ministerio de Salud? He ahí una razón más que indica desde ya, en caso gane el Partido Patriota, la administración pública será de hecho militarizada.
Por su parte, el presidenciable de la UNE manifiesta que promoverá la creación de los Consejos Departamentales de Salud como entes fiscalizadores de la actividad salubrista del país. Lo anterior vendría a duplicar esfuerzos ya que existen los Consejos previstos en la Ley de Desarrollo para tales fines.
La imparable vorágine de ventas de los activos del Estado iniciada por el gobierno demócrata cristiano de Vinicio Cerezo con la venta de AVIATECA, y aprovechada por el «primer gobierno de empresarios» presidido por el señor ílvaro Arzú, cuando se vendieron la mayoría de empresas rentables del Estado guatemalteco a la iniciativa privada bajo las denominaciones de «concesiones».
Ahora resulta que los dos candidatos presidenciables anuncian que los servicios de salud también serán «concesionados a la iniciativa privada». Eso es estar al servicio de la oligarquía guatemalteca y terminar de despojar al Estado de los pocos servicios con sentido social que presta a la población.
Qué lástima que estos candidatos a Presidente de la República de Guatemala también respondan a los intereses económicos de los estratos económicos pudientes, es decir, de los verdaderos dueños de Guatemala, quienes en su afán de seguir explotando los recursos naturales y a la población guatemalteca, juegan un papel deleznable aportando millones de dólares USA para la campaña política de ambos candidatos.
Pero así es la forma de conservar el poder, hoy invierten millones y mañana los gobernantes y sus partidos políticos les pagarán la factura por medio de sus diputados quienes elaborarán leyes «a la medida» para que siga la explotación. El próximo gobierno no será de «empresarios» pero será un gobierno de lacayos, sirvientes y siervos, por no decir esclavos, de los eternos conquistadores.
QUí‰ LíSTIMA, PUES AMBOS CANDIDATOS DECEPCIONAN Y OFRECEN PURAS PAJAS, íMBOS PRENDIERON LA RETORICA HIPí“CRITA DE QUIENES QUIEREN LOGRAR UN ASCENSO SOCIAL VERTICAL DENTRO DEL MUNDO ECONí“MICO SOCIAL GUATEMALTECO.