El jefe del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, consideró el viernes que la tasa de desempleo, que duplica la del promedio de la Unión Europea (UE), ha llegado a ser «inasumiblemente alta», y defendió una reforma para gestionar mejor oferta y demanda de empleo.
«Tenemos una tasa de paro inasumiblemente alta», afirmó Zapatero durante una rueda de prensa para hacer un balance del primer semestre del año 2010.
«El paro es la gran asignatura pendiente», afirmó el jefe del gobierno socialista español, añadiendo que «el gran reto como sociedad es cambiar la situación ante el paro».
El índice de desocupación en España a fines de junio se situaba en 20,09% de la población activa, frente a 20,05% tres meses antes, según datos oficiales divulgados este viernes. En el conjunto de la UE, formada por 27 países ese índice es de 10%.
El nuevo dato llegó al día siguiente de que la Comisión de Trabajo del Congreso de los Diputados aprobara la reforma del mercado de trabajo, que busca una mayor flexibilización del mercado laboral para fomentar el empleo, pero que es denunciada por los sindicatos como un instrumento para abaratar el despido.
Según Zapatero, las políticas públicas para ayudar a los desempleados a encontrar trabajo «están lejos de lo que deseamos», y por eso, agregó, «el gobierno quiere introducir cambios en la política de empleo».
«Tenemos que cambiar muchas cosas», afirmó.
Zapatero dijo que el índice publicado el viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE) muestra «un dato positivo», ya que «por primera vez en dos años, la economía española consigue crear empleos».
«Estamos convencidos que la recuperación económica ha continuado en el segundo trimestre», añadió.
«La economía española tiene fuerza para crecer», aunque el crecimiento sea «aún débil», destacó.
Zapatero sostuvo que la reforma del mercado laboral tiene como «objetivo fundamental evitar despidos, salvar empresas, aumentar la estabilidad del empleo».
El texto quiere reducir la dualidad del mercado de trabajo, entre contratos de trabajo indefinidos relativamente bien protegidos y los contratos precarios cada vez más numerosos.