La SAT autoriza y encubre contrabando aduanero (II)


Eugenio_Fernandez

Como se indicaba la semana pasada, la Resolución SAT-S-733-2008, firmada por el Ex Superintendente de Administración Tributaria, Rudy Villeda, instruye al Intendente de Aduanas a que emita reglamentación interna para que el Depósito Aduanero de La Riviera pueda operar como tienda libre de impuestos. Esta “reglamentación” es clave conocerla, ya que nos dirá cómo se da operatividad a la defraudación aduanera.

Eugenio R. Fernández


Pero tenemos que hacer un paréntesis para hacernos preguntas claves que nos amplían el panorama y poder explicar cosas importantes después. Para entender qué pasó y por qué no ha sucedido nada desde la SAT, hay que responder a lo siguiente: ¿Cómo la SAT ha podido encubrir esta defraudación aduanera por seis años? ¿No ha habido ya tres Superintendentes y varios intendentes de asuntos jurídicos, aduaneros y demás en todo este tiempo? ¿Cómo es que nadie se ha opuesto a este contrabando aduanero? ¿Por qué funcionarios asumen riesgos de otras administraciones? ¿Y el Directorio qué papel juega en todo esto?

Hay dos situaciones que nos aclaran estas preguntas: La primera es al analizar la Intendencia de Aduanas y la Intendencia de Asuntos Jurídicos, intendencias clave en todo este asunto, a través de estos años. Cuando llega Rudy Villeda a la SAT, en el 2008, se encuentra en la Intendencia de Aduanas Óscar Funes, éste sale a los tres meses de la llegada de Villeda y aparece en la Intendencia de Asuntos Jurídicos Ángel Menéndez. Cuando Villeda se retira de la Superintendencia sale junto con Menéndez. Llega como nuevo Superintendente Miguel Gutiérrez en el 2012 y pone de nuevo en la Intendencia de Aduanas a Óscar Funes. Al irse Miguel Gutiérrez también se retira Óscar Funes de  Aduanas. Por último antes que se nombre a Carlos Muñoz como Superintendente, en el 2013, le imponen de nuevo a Ángel Menéndez como Intendente de Asuntos Jurídicos, quien la dirige esa dependencia actualmente.

Podemos observar cómo estos dos señores, Funes y Menéndez, se han rotado en su puesto para garantizar, que en el caso “La Riviera”, no pase nada. Ellos le explican a cada nuevo jefe la “base legal” por la cual puede funcionar esta operación ilegal y alinean a los mandos medios y a cualquier otro posible disidente.

La segunda respuesta tiene que ver con la persona cuyo apodo es El Arquitecto o Encantador de Serpientes, Vicente Lemus. Este hombre ha laborado en la SAT como asesor en aduanas desde su creación y según el propio Rudy Villeda es quien “ve toda esa cuestión”. En las declaraciones vertidas en el diario La Hora del 30 de abril del 2012 a Villeda le preguntaron” “¿Por qué en la Resolución SAT-S-733-2008… usted ordenó se permitiera la operación de una tienda libre?”, a lo cual Villeda respondió: “… no me acuerdo como dice la resolución… no me recuerdo mucho ahorita, pero quien tiene la información es el Lic. Vicente Lemus en la SAT, porque él es el que ve toda esa cuestión…” Hago énfasis en “porque él es el que ve toda esa cuestión”. Claramente Lemus, quien es especialista aduanero, armó el ardid legal y estuvo vinculado en la formulación de la Resolución SAT-S-733-2008. Él ha sido el encargado de proteger dicha resolución contra viento y marea, confundiendo y mintiendo, –sus otras especialidades–. Sin embargo, él solo no  hubiera podido hacer el trabajo desde adentro, siempre necesitó del apoyo de los “Intendentes Rotativos”. Este trío dinámico ha logrado que el Ministerio Público se quede paralizado y no haga nada.

Queda claro que este “trío” son solo títeres de un gran titiritero, que tiene suficiente poder en el país para alinear no solo a la SAT, al Ejecutivo, al Organismo Judicial y al Ministerio Público.

En las próximas columnas las dedicaremos al encubrimiento que gestionó Ángel Menéndez desde la Intendencia de Asuntos Jurídicos.