La reforma al artí­culo 212 es una cuestión de justicia e igualdad


Delia Back es licenciada en Administración de Empresas y en Ciencias Polí­ticas por la Universidad Rafael Landí­var. Desde enero de este año ocupa la Presidencia de la Comisión de la Mujer del Congreso de la República. En esta entrevista se refiere a la iniciativa de Ley 4008 que busca reformar el artí­culo 212 de la Ley Electoral y de Partidos Polí­ticos, que norma lo relativo a la postulación e inscripción de candidatos y candidatas a cargos de elección popular. Back explica que la reforma propone la alternabilidad -por género y etnia- en los listados a cargos de elección popular, que presentan los comités cí­vicos y los partidos polí­ticos al inscribir las candidaturas.

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Esta reforma, asegura, permitirá cumplir con el principio de igualdad que establece la Constitución de la República y contribuir a eliminar las desigualdades históricas que sufren las mujeres y los pueblos indí­genas, en lo que a representación y participación polí­tica se refiere. La iniciativa se encuentra en la Comisión de Asuntos Electorales que deberá conocerla y emitir un dictamen favorable, previamente a que pase al pleno del Congreso para su aprobación.

– Más Mujeres, Mejor Polí­tica (MMMP): ¿En qué consiste la reforma al artí­culo 212 de la Ley Electoral y de Partidos Polí­ticos que impulsa la Comisión de la Mujer del Congreso?

– Delia Back (DB): Es una iniciativa de ley que busca reformar el artí­culo 212 de la Ley Electoral y de Partidos Polí­ticos que se refiere a la postulación e inscripción de candidatos con el objetivo de cumplir con el artí­culo cuatro de la Constitución que garantiza la igualdad entre todos los guatemaltecos.

La reforma pretende lograr la alternabilidad en los listados a cargos de elección popular. La propuesta de la Comisión con esta reforma es que el artí­culo 212 quede redactado de la siguiente manera: «Las planillas de postulación a cargos de elección popular deberán incluir en forma igualitaria a mujeres indí­genas y ladinas o mestizas y hombres indí­genas y ladinos o mestizos, en forma proporcional a la composición del distrito electoral correspondiente, de acuerdo con los datos del último censo nacional de población. El orden de postulación deberá alternarse entre mujer y hombre, de manera que a una posición ocupada por una mujer, siga la posición ocupada por un hombre, o viceversa, y así­ sucesivamente, para que tanto hombres como mujeres participen igualitariamente en cuanto al número y posición en las casillas».

– MMMP: Esta alternabilidad de generó y étnica ¿se aplicará en todos los listados de elección popular?

– DB: La reforma es para todos los cargos de elección popular y debe ser cumplida por todos los partidos polí­ticos y los Comités Cí­vicos que postulen e inscriban candidatos a todos los cargos de elección popular. Esta reforma prevé que los listados se realicen de forma proporcional a la composición étnica del distrito electoral correspondiente.

– MMMP: ¿Qué ocurre si, aprobada la reforma, un partido polí­tico o un comité cí­vico no cumplen con el requisito de la alternabilidad?

– DB: El Tribunal Supremo Electoral estarí­a en condición de no inscribir esas planillas. La iniciativa de ley estipula que el Registro de Ciudadanos rechazará la inscripción de las planillas que no llenen los requisitos que estipula esta reforma de ley.

– MMMP: ¿Cuáles fueron las razones que motivaron a que desde la Comisión de la Mujer se impulsará una reforma de esta naturaleza?

– DB: En primer lugar la Constitución de la República garantiza la igualdad para todas las personas. Esta igualdad en la práctica no existe, las mujeres hemos sido discriminadas históricamente. Lo mismo ocurre con los pueblos indí­genas. Guatemala ha ratificado una serie de instrumentos internacionales -que según el artí­culo 46 constitucional tienen preeminencia sobre el derecho interno- que buscan eliminar estas desigualdades históricas. El artí­culo 7 de la Convención para la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra las Mujeres (CEDAW) establece que «los Estados partes tomarán todas las medidas apropiadas para eliminar la discriminación contra la mujer en la vida polí­tica y pública del paí­s y, en particular, garantizarán a las mujeres, en igualdad de condiciones con los hombres, el derecho a ser elegibles para todos los organismos cuyos miembros sean objeto de elecciones públicas».

En cumplimiento de la Constitución y de la legislación nacional e internacional y con el objetivo de adoptar medidas concretas para cumplir con el principio de igualdad, decidimos impulsar desde la Comisión esta reforma. Lo que hacemos las ponentes de esta ley es cumplir con nuestra responsabilidad y llevar adelante una medida que creemos va a reducir las desigualdades para las mujeres y los pueblos indí­genas. Nos preocupa que haya tan pocas mujeres y tan pocos indí­genas en los cargos de dirección, en las gobernaciones, en el Parlamento, nos preocupa que el Gabinete de gobierno no tenga mujeres y que solamente hayan seis alcaldesas cuando tenemos 333 municipalidades y de éstas solamente dos sean indí­genas.

– MMMP: ¿Cuáles son los objetivos que se buscan alcanzar con esta reforma?

– DB: Nuestro objetivo serí­a que tuviéramos el 50%% de mujeres en el Parlamento, en las alcaldí­as y en los cargos de dirección. Nosotras no queremos ser pesimistas, pero vemos la realidad; si no alcanzamos un 50%%, por lo menos queremos llegar a un 30%% o un 40%%, eso ya serí­a un avance en Guatemala. En Costa Rica, por ejemplo, las reformas de ley que han impulsado en materia electoral han permitido aumentar el número de mujeres congresistas y todo ha sido un proceso.

– MMMP: ¿Porque se tomó la decisión de impulsar la reforma al artí­culo 212 de forma independiente al resto de reformas a Ley Electoral?

– DB: El año pasado estuve participando en la Comisión de Asuntos Electorales con el diputado (Valentí­n) Gramajo, que era el presidente de la Comisión. Estuvimos en tantas reuniones, fuimos, venimos, nos encerramos, trabajamos y eso no caminó. Ahora ya terminamos el segundo año y nosotros creemos que esa reforma integral no se va a dar. El próximo año es preelectoral y vamos a estar ocupados en campañas, y el siguiente es el año electoral, y realmente no creemos que esto vaya a pasar.

Por lo tanto, decidimos plantear solamente la reforma al artí­culo 212, porque es más fácil que pase una sola reforma, a que pasen todas las reformas que se habí­an impulsado en la Ley Electoral y de Partidos Polí­ticos.

– MMMP: En ese ámbito, ¿cuántas diputadas de la comisión y de qué partidos promueven esta reforma al 212?

– DB: Somos nueve diputadas las que formamos parte de la Comisión de la Mujer y pertenecemos a diferentes partidos polí­ticos. Firmamos la iniciativa la diputada Rosa Zapeta, Beatriz Canatuj, Elsa Leonora Cu, Maura Estrada, Dolores Beltrán, Otilia Lux, Thelma Ramí­rez, Mirza Arreaga y Rosa Marí­a de Frade.

– MMMP: ¿Por qué la iniciativa no cuenta con firmas de diputados varones y de otras mujeres diputadas?

– DB: Bueno, ahí­ quizá cometimos un error de no haberles pedido su apoyo a los diputados varones, simplemente como nosotras como Comisión estuvimos trabajando en esa reforma, pues nosotras fuimos las ponentes. Sin embargo, pudimos haberle pedido a los compañeros varones que nos apoyaran y yo creo que hubiéramos tenido firmas de los varones también, sin embargo, no lo hicimos. Y de las compañeras diputadas, que no están en la Comisión, la única que realmente presionó para firmar y para ser ponente fue la diputada Rosa Marí­a de Frade.

– MMMP: ¿En que parte del proceso legislativo está en este momento la iniciativa?

– DB: La iniciativa ya entró al Pleno en el mes de agosto, luego pasó a la Comisión de Asuntos Electorales. Ahora estamos esperando el dictamen de esta Comisión para que regrese nuevamente al Pleno y pase a primera, segunda y tercera lectura, y redacción final. Es un momento decisivo, porque la Comisión debe agendarla, conocerla y darle un dictamen favorable.

– MMMP: ¿Cómo analizan la situación dentro de la Comisión de Asuntos Electorales?

– DB: Estamos muy positivas en que eso se dará. Hemos tenido varias conversaciones con el diputado César Fajardo, presidente de la Comisión, que ya está trabajando en el dictamen conjuntamente con los asesores de la Comisión de la Mujer; sin embargo, recordemos que no es sólo el diputado César Fajardo y los diputados de la UNE que somos parte de la Comisión los que dictaminamos. Tenemos oposición del FRG, tenemos oposición del Partido Patriota y del partido LIDER, sin embargo, nosotros creemos que ellos también están conscientes que las alcaldí­as y las diputaciones las ganaron por el trabajo que han hecho las mujeres en el área rural y en los departamentos y municipios; y que esto puede cambiar su posición. Yo creo que serí­a muy difí­cil el que no apoyaran esta iniciativa, cuando son las mujeres las que han trabajado y los han llevado al Congreso y a las alcaldí­as. No creo que quieran quedar en evidencia.

– MMMP: Sin embargo, una diputada de la bancada Lí­der es ponente de la iniciativa.

– DB: Exactamente, por eso estamos esperanzadas en que puedan influir en la lí­nea institucional de su agrupación, que es la que está en contra.

– MMMP: ¿Qué acciones están promoviendo desde la Comisión de la Mujer para lograr que el dictamen sea favorable?

– DB: Estamos trabajando muy de cerca con la sociedad civil, con la Iniciativa Más Mujeres Mejor Polí­tica, Convergencia Cí­vico-Polí­tica de Mujeres, la Asociación de Mujeres Mayas MOLOJ, también con quienes integran el Foro Permanente de Partidos Polí­ticos; nos apoya la comunidad internacional, las embajadoras de diversos paí­ses, el Fondo de Población de Naciones Unidas y UNIFEM. También hay embajadores varones que están apoyando.

Tenemos una estrategia de trabajo, una estrategia de incidencia polí­tica y de trabajo de divulgación. Es muy importante que las mujeres se apropien de esta iniciativa, es vital que se dé a conocer a los pueblos indí­genas que estamos impulsando una reforma para garantizar su participación y representación en igualdad de condiciones.

– MMMP: ¿Existen otros paí­ses que hayan aprobando medidas similares, y donde se hayan obtenido resultados positivos?

– DB: Claro que sí­. En América Latina varios paí­ses han mostrado cómo al impulsar estas acciones afirmativas, a través de leyes y polí­ticas públicas el panorama empieza a cambiar. Costa Rica es un buen ejemplo, de lo que afirmo. También Argentina, Uruguay y México. Cuando estas medidas se aplican, el número de mujeres en cargos de elección popular aumentan. En Bolivia por ejemplo, hubo un 54%% de crecimiento de la representación femenina en el Parlamento, a partir de la aprobación de una ley de cuotas. En Ecuador, la participación creció un 300%%. Eso demuestra que sí­ se puede, y que una buena forma de iniciar los procesos de cambio es a través de la promoción de estas leyes.

– MMMP: ¿Por qué es importante que haya más mujeres e indí­genas participando en polí­tica y ocupando cargos públicos?

– DB: Primero es una cuestión de justicia. Además, las mujeres somos más transparentes, más trabajadoras, somos madres, somos esposas, somos hijas, y conocemos el diario vivir del guatemalteco y de las guatemaltecas y podemos promover polí­ticas y legislación que beneficie a las mujeres, a las familias y a los grupos más vulnerables. Teniendo más mujeres en la polí­tica, tendrí­amos una mejor Guatemala, mejorarí­a la salud, la educación, los programas sociales. Por eso es muy importante que se nos dé la posibilidad de participar en igualdad de condiciones.

– MMMP: ¿Cuenta esta iniciativa con el aval del presidente ílvaro Colom y de todos los diputados que integran la bancada de la UNE?

– DB: Sí­. Cuenta con el aval del presidente Colom y de la primera dama Sandra Torres de Colom, de todos los diputados y diputadas de la bancada oficial. Nosotros estamos comprometidos; cuando iniciamos este perí­odo legislativo era una de nuestras prioridades que pasara la ley. Estamos comprometidos con la alternabilidad, con la paridad, con la búsqueda de la igualdad.

– MMMP: ¿Qué escenarios prevé de aprobarse o de improbarse esta iniciativa de ley?

– DB: Tenemos el tiempo en contra. Si no logramos que esta iniciativa pase este año, el próximo año va ser un poco difí­cil, y el último año de campaña serí­a imposible. Sin embargo, si hay voluntad polí­tica de los partidos que en el Congreso votamos por una agenda legislativa común, podrí­amos lograrlo.

Nosotras las ponentes estamos muy positivas que esta ley se va a aprobar. Queremos además evidenciar a todos los varones diputados que no estén de acuerdo, y lo queremos hacer claramente, frente a los medios, para que tengan que responder antes sus electores y electoras si alguno de ellos se opone a esta reforma. Hemos consensuado esta iniciativa en las regiones de Guatemala, hemos hecho algunas reuniones en varios departamentos, y las mujeres están muy bien enteradas de que esta iniciativa va; por lo tanto la van a estar apoyando desde los departamentos.

«Serí­a muy difí­cil el que no apoyaran esta iniciativa, cuando son las mujeres las que han trabajado y los han llevado al Congreso y a las alcaldí­as».