La temporada 2012 para mí finalizo después de la última ronda del Abierto de la Republica Argentina a mediados de diciembre y desde entonces que no tocaba un palo de golf hasta el día de ayer.
A pesar de que me encanta el golf y lo que hago, si necesito tomarme un tiempo de descanso y recargar las baterías. De hecho esto fue algo que aprendí a hacer hasta recientemente. Antes solía jugar golf siete días a la semana y casi 365 días del año.
Fue hasta cuando empecé a trabajar con el psicólogo deportivo Fran Pirozzolo que esto cambió. Dentro de la filosofía de entrenamiento que aplica Fran, se le pone una importancia significante al descanso. El principal objetivo de esto es para permitirle al cerebro que se recupere de tanto trabajo que ha tenido.
La temporada 2012 fue sumamente agotadora, especialmente la segunda mitad del año. Desde septiembre hasta mediados de diciembre jugué en 13 torneos. O sea en 15 semanas jugué en 13 torneos. Y cada torneo dura una semana así que prácticamente no tuve ni chance de respirar desde Septiembre. A pesar de que me encanta lo que hago y gozo cada minuto de estar dentro de un campo de golf, al final de la temporada termine muy cansado. La mayoría del cansancio no es físico si no mental. Una semana de torneo requiere de mucho enfoque mental. Los días de practica debo tomar notas y estar enfocado para acostumbrarme al campo lo mejor que pueda y preparar mi juego para que este en optimas condiciones para el campeonato. Luego en las rondas competitivas entro en un enfoque total. Dado a que le estoy exigiendo tanto a mi cerebro cada semana competitiva a lo largo de la temporada es crucial que le permita que descanse y se recupere.
El error que cometen muchas personas es que no se permiten descansar ni un solo momento porque creen que así lograran mayores resultados. De hecho se han hecho múltiples estudios en donde se analiza el rendimiento de dos grupos diferentes. Un grupo es sometido a numerosas horas continuas de trabajo sin descanso y el otro a un numero menor de horas totales de trabajo y acompañado de varios descansos. Los resultados fueron bastante marcados. El grupo que trabajó en total menos horas, pero con descansos obtuvo un rendimiento mucho más eficiente que el otro.
Hoy en día muchos empresarios ya ni siquiera se toman el tiempo para almorzar. Sus días están tan ocupados que ni almuerzan. No solo la eficiencia de su trabajo esta siendo afectada, si no también su salud. El hecho de no comer nada a lo largo del día no es bueno para el cuerpo y trabajar todo el día aumenta significantemente el estrés. Luego la gente se pregunta porque tienen presión alta, ansiedad, infelicidad y otras complicaciones. La ambición nos lleva a pensar que no podemos dejar de trabajar ni un solo segundo y dejamos por un lado todas las demás cosas de la vida. La familia, la diversión, los hobbies, los amigos, etc. Se tiene un carrazo parqueado afuera de la casa, pero por dentro no se tiene nada más que pura insatisfacción e infelicidad.
Una manera de verlo es como me lo explico el Presidente y mayor accionista de una de las empresas petroleras más grandes de Estados Unidos. Un día íbamos jugando golf y me sorprendí de lo calmado que estaba y de lo desconectado de la vida que iba, así que le pregunte: ¿Cómo una persona con un puesto tan importante como el suyo en donde seguramente tiene muchísimo trabajo que hacer, puede estar tan tranquilo y gozando tanto de una ronda de golf sin estar pendiente del celular y los correos como lo suelen hacer tantos empresarios de su nivel? Me respondió, la clave en los negocios es el timing. En este momento el precio del petróleo esta relativamente bajo así que me la tomo tranquilo y dejo que el precio suba solo. Cuando el precio esta alto, es el momento de trabajar con todo. Ahí si ya no me veras por acá ni un solo día. Muchas veces nos enfrentamos con una puerta cerrada frente a nosotros y a fuerza la queremos abrir en vez de dejar que se abra. Por querer abrir la puerta a la fuerza, la botamos.
Así que manejemos nuestro tiempo eficientemente. Valoremos la importancia y veamos los beneficios que puede tener tomarse un breve descanso de vez en cuando. Nuestro trabajo va a ser mas productivo y nuestro cuerpo no lo va a agradecer.