La princesa Letizia da a luz a Sofí­a


La princesa de Asturias, Letizia Ortiz, esposa del heredero de la Corona española, Felipe de Borbón, dio a luz este domingo en Madrid a su segunda hija, que se llamará Sofí­a en honor de su abuela la Reina, y será la tercera en la lí­nea de sucesión al trono.


«Nos hací­a mucha ilusión que la reina tuviera una nieta con su nombre», dijo el prí­ncipe Felipe, al informar del nacimiento de su segunda hija en una comparecencia ante los medios acompañado por el equipo médico que atendió a doña Letizia Ortiz durante su parto en la clí­nica privada Ruber Internacional, en el norte de Madrid.

Doña Letizia «ha dado a luz mediante cesárea a las 16h50 locales (14h50 GMT) a una niña que ha pesado 3,310 kilos y ha medido 50 centí­metros», informó el doctor Luis Ignacio Recasens, jefe del equipo médico, antes de añadir que «tanto la Princesa como su hija están en perfecto estado».

El Prí­ncipe, visiblemente emocionado, declaró en una carpa instalada en el aparcamiento del centro hospitalario: «Estamos realmente felices (…) realmente contentos» por el nacimiento de la Infanta Sofí­a.

La Casa Real habí­a informado a las 17H28 locales (15H28 GMT) del nacimiento con mensajes a los teléfonos de los periodistas que esperaban el acontecimiento a la puerta de la clí­nica.

Los periodistas y fotógrafos se mantení­an a la expectativa desde que sobre las 13H00 locales (11H00 GMT), la Princesa llegó al centro hospitalario acompañada por el prí­ncipe Felipe, en un furgoneta con numerosa escolta, dos dí­as después de salir de cuentas, el pasado dí­a 27.

Casi cuatro horas más tarde, la princesa Letizia daba a luz a su segunda hija, en un parto que ha sido más rápido que cuando hace año y medio nació su primogénita, la infanta Leonor, también por cesárea, a las 01H47 locales de la madrugada del 31 de octubre de 2005, después de que la madre fuera ingresada sobre las 20H00 locales.

El parto se produjo poco después de que llegara a la clí­nica Paloma Rocasolano, la madre de doña Letizia Ortiz, sobre las 16H45 locales (14H45 GMT).

El prí­ncipe confesó que comunicó el nacimiento en primer lugar al rey Juan Carlos y que ya ha revelado a su madre que su nueva nieta se llamará también Sofí­a, un nombre de origen griego, como la Reina, y que significa «sabidurí­a».

El alumbramiento sorprendió a la reina Sofí­a de regreso a Madrid desde Moscú, donde acudió al funeral de su gran amigo, el famoso violonchelista y director de orquesta Mitislav Rostropovich, fallecido el viernes. Nada más llegar a Madrid, doña Sofí­a se dirigió a la clí­nica a las 21H30 locales (19H30 GMT) para conocer a su nueva nieta.

Los reyes expresaron «su gran alegrí­a ante este feliz acontecimiento» en un comunicado a los medios, y junto a ellos, las felicitaciones han llegado desde todos los ámbitos de la sociedad española.

El jefe del gobierno español, José Luis Rodrí­guez Zapatero, transmitió su «calurosa enhorabuena» al Prí­ncipe de Asturias, al igual que hizo el jefe de la oposición conservadora Mariano Rajoy, que envió un telegrama con su más «afectuosa enhorabuena».

El Prí­ncipe señaló que los detalles sobre el bautizo se darán a conocer más adelante y desveló que se ha conservado sangre del cordón umbilical de la Infanta Sofí­a para la eventual utilización de células madres en caso de necesidad o enfermedad.

«Hemos guardado el cordón umbilical. Es algo en lo que tenemos confianza y creemos en ello; y creo que la ciencia y la medicina están avanzando mucho en ese campo y nos hemos informado mucho», dijo, confesando los «nervios» que pasó en el nacimiento de su hija.

La Infanta Sofí­a, que será la tercera en la lí­nea de sucesión al trono por detrás de su padre y su hermana, es la octava nieta de los reyes Juan Carlos y Sofí­a.