LA NAVIDAD Y SUS PROHIBICIONES DíCESE CRISTIANAS


Ahora vengo a hablarte de los predicadores que dicen que no se puede tener un Nacimiento, ni arbolito de Navidad, ni disfrutar de estas fiestas de fin de año, porque son fiestas del paganismo. ¿Y qué fue el paganismo? Un grupo de disidentes de la fe cristiana, idólatras (adoradores de í­dolos), burlones, incrédulos y aduladores de aquellos tiempos, y nada que ver con lo que en la actualidad estamos viviendo que, hasta quieren los malos predicadores privar a los niños de la presencia de SANTA CLAUS.

Jesús Alvizures

 


Es cierto que son celebraciones de origen pagano, pero este concepto aquí­ no aplica, porque nosotros somos una generación distinta que acepta y coloca cada punto donde el ordenamiento lo exige; no, no es como dicen que se están violando los conceptos religiosos, porque estos charlatanes no dejan de fastidiar con sus infundadas creencias de pecado, cuando el pecado lo tienen frente a ellos y no lo ven, porque para proyectarse al bien son miopes.
Pobres hombres que deberí­an dedicarse a conquistar almas y no a adaptar influencias que se dice son inventos de paganos y cristianos de la vieja era que, quizá antes o después de Jesucristo, tuvo su origen.
“La alegrí­a sana del pueblo hay que respetarla, pues con ello ningún daño se está causando, y los que predican mi palabra mejor que se dediquen a corregir sus errores y traten de enmendarlos, porque Yo, Jesucristo, desdigo esa mentira.
Alaben al Señor su Dios, como cada quien lo conciba, y no anden por malos caminos de pecado y perdición, y con ello me estarán agradando.
Para dar base a estos argumentos, busquen la cita bí­blica que se refiere a estos conceptos.
Pero hay que reconocer que mi palabra la acomodaron los infractores del pasado a la manera de su conveniencia y mantener sujetos a quienes siempre han buscado el amor de Dios.
No, hermanos, no os dejéis engañar y solo os recomiendo no adorar íDOLOS en las Navidades, y por lo demás disfrutad de lo que en la legalidad de mi Ley no es prohibido.
Mirad, abrid los ojos y veréis a muchos predicadores –digo muchos, no todos– codiciando los bienes y la mujer del hermano, del siervo que en sus enseñanzas cree; ved también la recolecta de OFRENDAS para ellos y no para dar a los niños un regalo de Navidad, un café, un tamal o una taza de ponche.
Esto es lo que deben hacer los que dicen que aman mi palabra y no andar poniendo en evidencia lo que otros dan y ellos no pueden dar, porque moneda o billete recibido, billete guardado.
Quisiera preguntar qué le espera a mis Evangelios con esa charlatanerí­a que en vez de atraer al conglomerado al seno de la ORACIí“N, éste es alejado con estos conceptos erróneos que carecen de una verdad existente y que si fuese verdad les darí­a fuerza para prohibir estos acontecimientos de la era mitológica. Se dice de paganos y cristianos, PERO, ¿DE QUí‰ CRISTIANOS SE HABLA? Seguramente de cristianos falsos, porque el verdadero cristiano ama y respeta mis mandatos”.
Concluyamos este mensaje, que no les va a gustar a los opresores de las religiones, pero así­ como lo digo así­ es.
¡FELIZ NAVIDAD!