La mujer que asumirá la presidencia del constitucionalismo en Guatemala


Gladys Chacón, magistrada de la Corte de Constitucionalidad, asumirá la próxima semana la presidencia del más alto organismo de opinión del Estado.

Las mujeres parecen tomar el control de los órganos independientes del Estado. Gladys Chacón, asumirá como presidenta de la Corte de Constitucionalidad este lunes, cuando iniciará la era de la digitalización de los procesos que allí­ se llevan. Modernizar y continuar con el rescate de la imagen del máximo tribunal del paí­s son los principales objetivos de la magistrada.

Karen Cardona
lahora@lahora.com.gt

Afortunadamente, la Corte de Constitucionalidad se ha convertido en la última instancia para resolver todos los conflictos de cualquier orden y naturaleza. Eso nos hace un poco, todólogos, porque aquí­ vemos todos los ramos. No quisiera parecer pretenciosa, pero créanme que estudio todos los dí­as y resuelvo todos los dí­as.La magistrada será la tercera mujer en tomar la presidencia de la Corte de Constitucionalidad.

Pregunta/ ¿Podrí­a describir cómo ha sido su trabajo a lo interno de la Corte, tomando en cuenta que usted es la única mujer dentro de los magistrados titulares?

Respuesta/ Independientemente de que sea una mujer la que asuma la Presidencia de este alto tribunal, para mi vida profesional representa gran satisfacción. A las mujeres nos cuesta y nos ha tocado abrir la lucha poco a poco. Independientemente de sentirme emocionada y contenta, sé que es un reto muy importante porque estoy representando a todas las mujeres. Es un compromiso grande, ya que no quiero defraudarlas y demostrar que somos capaces y que no se nos elige por el género, sino por nuestra capacidad y entrega al trabajo cuando se nos encomienda.

P/ ¿Cómo se siente usted con relación a Conchita Mazariegos y Alma Quiñónez, quienes también han ocupado el cargo que usted asumirá?

R/ Las dos mujeres que me han antecedido merecen todo mi reconocimiento y respeto, pero creo que a ellas les tocó vivir una situación que no puedo calificar de más fácil o difí­cil, pero sí­ siento que la situación mí­a es especial, por el momento que vive Guatemala, pues estaré ejerciendo la Presidencia con un nuevo gobierno. Al mismo tiempo es preocupante, porque el presupuesto es corto para llevar a cabo los proyectos que yo tengo para la Corte de Constitucionalidad. Este alto organismo ha crecido enormemente, en su función y misión que establece el orden constitucional. Tenemos cada dí­a más trabajo. En ninguna forma demerito el trabajo de Conchita y Alma, pero sí­ quiero agregarle un ingrediente importante a mi gestión. Afortunadamente podemos dar un aporte generacional, porque dentro de la CC, todos somos casi de la misma generación y mi papel de mujer es un poco menos difí­cil al ver la justicia constitucional con ojos de mujer, porque las mujeres somos dadoras de vida, estamos acostumbradas a viabilizar los obstáculos para resolver los problemas. Desde ser una ama de casa, hasta una máster, académicamente.

P/ ¿Cuáles son sus planes de trabajo al asumir como Presidenta del máximo tribunal de Guatemala?

R/ Soy una mujer muy ambiciosa y visionaria, con mucha capacidad de trabajo, cosa que agradezco a nuestro Creador y no quiero ofrecer grandes proyectos, pero sí­ quiero ver la Corte de Constitucionalidad en el tren de la automatización. Entre mis proyectos, quizás el más importante que me he propuesto es automatizar todos los procesos y procedimientos en la Corte de Constitucionalidad. Ello en virtud de cumplir con el mandato constitucional de dar justicia pronta y cumplida, que es lo que más exige el pueblo de Guatemala. Otro de mis proyectos es que nadie se quede sin justicia, que todos puedan tener acceso a ella, a través de los medios electrónicos, con los que cuenta ahora la modernización tecnológica.

P/ El 6 de marzo de 2006 usted dijo que se necesita carácter para limpiar el nombre de la Corte de Constitucionalidad. ¿Qué ha hecho usted sobre este respecto o qué piensa hacer al asumir la Presidencia?

R/ Creo que hemos logrado levantar la imagen que se habí­a perdido de la Corte de Constitucionalidad. Lo que yo he hecho es dar muestras de mi trabajo, soy magistrada que vive en la Corte de Constitucionalidad. Yo veo salir el Sol y la noche aquí­ y puedo decir con toda satisfacción que entrego mi despacho completamente al dí­a, como lo he mantenido durante estos últimos dos años. Afortunadamente tengo un equipo que se mantiene al dí­a. Impulsaré los procesos electrónicos e iniciaremos desde el primer dí­a de mi gestión que la agenda de ponencias vaya en un medio electrónico.

P/ Sobre su experiencia profesional, se sabe que antes de llegar a la CC, usted tení­a más contacto con temas del ramo civil. ¿Cómo se ha puesto de acuerdo con los demás magistrados en las sentencias emitidas sobre el ramo penal?

R/ Afortunadamente, la Corte de Constitucionalidad se ha convertido en la última instancia para resolver todos los conflictos de cualquier orden y naturales. Eso nos hace un poco, todólogos, porque aquí­ vemos todos los ramos. No quisiera parecer pretenciosa, pero créanme que estudio todos los dí­as y resuelvo todos los dí­as. Si bien en ese momento mi fuerte era el área civil, ahora, a través de la justicia constitucional, he tenido que aprender de todas las ramas del derecho, pero no quiero echarme sólo las flores a mí­, sino que también tengo un gran equipo de trabajo. Jóvenes que fueron mis alumnos y son excelentes, me fortalezco mucho en ellos.

P/ ¿Cómo ve usted el abuso del recurso de amparo?

R/ El trabajo de esta Corte se ha sobrecargado exageradamente por esto. Aquí­, hasta por una coma en una notificación se plantean amparos. Yo a veces lo he querido justificar en el sentido que la situación económica del paí­s es difí­cil y entonces los colegas abogados pretenden, a través del recurso de amparo, agenciarse de algunos ingresos y en efecto, así­ ha sido. Se hace abuso del amparo porque la Constitución y la Ley de Amparo al decir que el acto reclamado debe causar algún daño o gravamen para recurrir al amparo, pero desafortunadamente no ha sido así­.

P/ ¿Quién abusa más de este recurso, los organismos de Estado o los abogados particulares?

R/ Tenemos clientes de toda naturaleza (se rí­e), tenemos clientes de parte del Estado, tenemos a la Superintendencia de Administración Tributaria por ahí­, las municipalidades. Creo que más que ellos, los responsables son los abogados y asesores que litigan en este ramo. No estoy contra del amparo, creo que es el único medio de defensa que le queda al ciudadano guatemalteco sobre los abusos que puedan cometer las autoridades contra de ellos.

P/ ¿Está a favor de la legislación para poner lí­mites a los amparos?

R/ Sí­ estoy a favor, pero reitero, creo que es el único medio de defensa que queda y dejarí­amos indefensos a los guatemaltecos si desapareciera esta figura de nuestra Constitución.

P/ Hasta hace algunos años se decí­a que habí­a más de 15 mil expedientes sin resolver. ¿Cómo es la carga de trabajo ahora?

R/ Se ha reducido enormemente. Hay algunos cuellos de botella que he detectado ya y estamos dispuestos a entrarle a esos cuellos de botella que no están en las magistraturas, sino muchas veces están en la notificación, porque se notifica tardí­amente.

P/ En temas administrativos, ¿Cuánto ha crecido el personal de la Corte de Constitucionalidad?

R/ La Corte de Constitucionalidad ha crecido mucho, por ello hemos adquirido un nuevo edificio, porque todo el personal estaba hacinado y era imposible darles la higiene laboral. Por el momento no tenemos pensado continuar con el crecimiento fí­sico, porque al tecnificar los procesos, habrá reducción de personal.

P/ Entonces ¿Usted prevé recortar el personal de la Corte de Constitucionalidad?

R/ Yo dirí­a que sí­.

P/ Derivado del fallo emitido el 12 de diciembre de 2007 por este alto organismo, en el que se resolvió que España no tiene jurisdicción para juzgar a cinco generales y dos civiles por delitos cometidos durante el Conflicto Armado Interno, Rigoberta Menchú presentó una querella contra los magistrados, incluida usted, ¿Cuál es su punto de vista sobre esta acción? ¿Podrí­a explicar los principios que prevalecieron en aquella ocasión para emitir el dictamen?

R/ Bueno, la querella, realmente y con todo respeto, creo que más se debe a cuestiones sentimentales, pero la querella fue desestimada inmediatamente. Nosotros resolvimos conforme a derecho y estamos obligados a cuidar la soberaní­a del Estado. Creo que a ninguno de nosotros nos gustarí­a que viniese otro Estado a juzgarnos, sino que deben ser los juzgados de nuestro paí­s. Incluso los españoles han sentado jurisprudencia sobre esto y la sentencia nuestra, quiero decirle que ha sido muy comentada a nivel internacional por haber fallado en esa forma. Nosotros no resolvimos por ningún interés en particular, sino únicamente en cumplimiento de la Constitución y por la obligación que tenemos de cuidar la soberaní­a del Estado.

P/ Ya que hablamos de soberaní­a, aún hay un amparo que esta Corte debe resolver sobre la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala, CICIG, ¿Se impondrí­a un juicio similar al del caso anterior sobre esta resolución?

R/ Aquí­ en este caso no hay ningún delito que se haya cometido, sino que al contrario es un apoyo que se le está dando al paí­s. Nosotros los guatemaltecos aún carecemos de muchos medios para llevar a cabo pruebas y medios cientí­ficos para dar con los responsables. El Ministerio Público aún no está dotado de todos los medios de investigación que necesita y es una cosa completamente diferente a la sentencia emitida en diciembre del año pasado.

P/ Debido a que la Corte de Constitucionalidad ha sentado jurisprudencia sobre algunos casos, como el del general Efraí­n Rí­os Montt, en cuanto a su participación como candidato presidencial, si él volviera a intentarlo ¿También se sentarí­a jurisprudencia y se le volverí­a a permitir que se postule como aspirante a la primera magistratura?

R/ Es un caso hipotético verdad. Entonces le contesto hipotéticamente y no lo hago en nombre del pleno, sino en mi opinión personal. Considero que no. La Constitución es muy clara y es fácil de interpretarla. La Corte anterior sólo lo quiso favorecer, pero existe jurisprudencia sobre esto. Ni él ni nadie, mientras nuestra constitución no cambie.

P/ Ya que habla de cambios a la Constitución. ¿Considera conveniente hacer una reforma a la Carta Magna, como se ha dicho en las esferas polí­ticas?

R/ Creo que la Constitución de 1985 es una buena Constitución, lo que pasa es que no se ha terminado hasta la fecha de desarrollar, pero creo que en este momento Guatemala no está preparada para una reforma constitucional, porque en primer lugar no contamos con los recursos para ello y debemos tomar en cuenta al pueblo de Guatemala, que es el que al final sufre o gana las consecuencias de una buena Constitución. Yo creo que la nuestra es buena.

P/ Se le ha criticado en muchas ocasiones, que por ser usted la delegada de la Corte Suprema de Justicia y por haber fungido como Gerente General de este organismo, aún hace uso de vehí­culos y guardaespaldas de esa entidad, ¿es eso cierto?

R/ Yo no tengo guardaespaldas y tampoco vehí­culos. No. Fui electa por la CSJ, pero he ido una o dos veces de visita en el primer año y no he vuelto a ir porque el tiempo no me lo permite. Fí­sicamente pueden ver que nunca hay nadie armado cuidándome. Quizás no lo deberí­a decir yo, pero soy una mujer muy valiente.

P/ ¿Pero su integridad fí­sica no se ve en riesgo? ¿Ha sido objeto de intimidaciones?

R/ Sí­, pero yo estoy dispuesta a asumir esos riesgos. No me han intimidado, ni me han presionado. A mí­, ni siquiera me llaman (se rí­e).

P/ Debido a que el presupuesto de la CC, depende del de la CSJ, ¿Considera que el aporte a este alto organismo es suficiente o amerita un incremento?

R/ Nosotros tenemos un presupuesto de 54 millones de quetzales y dentro de mis planes está subirnos al carro de la informática y hasta los mismos teléfonos celulares son cambiantes. Ahora es barata la tecnologí­a en comparación con hace 20 años. A pesar de ello tenemos problema, porque esto es sólo un porcentaje del presupuesto del Organismo Judicial y el año pasado les dieron una parte de la cual, nosotros no vimos nada y nos correspondí­an 8.5 millones con los que hubiéramos podido hacer mucho. Lamentablemente no se peleó.

Tengo la ventaja que el presidente ílvaro Colom me prometió ayudar en el aporte económico, de igual forma algunos diputados, porque han visto la obra, esto es muy transparente. Nadie aquí­, mucho menos los empleados tienen carros o teléfonos celulares de la Corte. Ni los magistrados suplentes. Se invierte sólo en la nómina y el funcionamiento de esta corte.

P/ Dentro de todo el quehacer de la Corte de Constitucionalidad, considera que con el tiempo, este tribunal pueda llegar a conocer el indulto, o serí­a intrascendente en un paí­s como Guatemala, en ví­as de desarrollo?

R/ Yo me imagino que el Congreso nos enviará el veto recién emitido, por lo menos para recabar opinión, pero no somos nosotros los indicados a otorgar o no el indulto. Pienso que si se ha llevado un debido proceso, eso corresponderá al juez que emita la sentencia.

Mientras el Código Penal y Procesal Penal no sufran ninguna reforma, la pena de muerte está en ley y hay que aplicarla. No es que esté a favor o en contra, basta con que esté en la ley y nosotros estamos obligados a cumplirla.

Finalmente, la magistrada Gladys Chacón, quien el lunes asumirá la Presidencia de la Corte de Constitucionalidad, solicitó a los organismos internacionales que coadyuven a este tribunal, para poder automatizar los procesos. «Con una computadora que nos regalen o nos donen, nosotros estaremos agradecidos. Eso va a permitir que cualquiera pueda ver, desde una central, que Dios mediante continúe el próximo presidente, en qué fase va su proceso, si ya se notificó, para que no haya necesidad de estar pidiendo favor, porque no es un favor, es una obligación. Estoy dispuesta a tocar las puertas de todas las instituciones para que aunque sea un UPS me regalen», culminó, entre risas, la entrevista con la profesional del Derecho, no sin antes recalcar que, a su criterio, son muy importantes los ojos de una mujer ante la justicia social, «no porque se falle con el corazón, sino porque tenemos otra perspectiva de la vida», puntualizó Chacón.