Se explica y se entiende por Misa, el sacrificio incruento de la ley de gracia o del perdón, en que bajo las especies del pan y del vino, el sacerdote ofrece simbólicamente al Dios Eterno el cuerpo y la Sangre de Cristo. A este sacramento asisten todos los feligreses a sus respectivas parroquias, los domingos y fiestas de guardar, para participar y oír este evento religioso que ofrece la Iglesia Católica.
La palabra liturgia viene del idioma griego que quiere decir servicio o trabajo, que en Grecia eran las obras por el bien de todos, que en oración pública de la Iglesia, en alabanza, se dirigían a Dios a quien le dedicaban  todas las palabras y obras.
Para todos los católicos la liturgia lo constituye la misa, y son parte de ella las celebraciones como unción a los enfermos en un hospital, el sacramento en el confesionario o en una capilla, incluso la distribución de la ceniza en y fuera de la misa en forma complementaria.
Todas estas manifestaciones de fe, se llaman liturgias, es decir un servicio de oración del pueblo, en la celebración de la Misa y de cualesquiera otros Sacramentos en un Santuario con iguales y santos propósitos para perdonar los pecados veniales.