Para lograr la plena formación de Guatemala se requiere de hechos históricos memorables bien conocidos por el pueblo, pero lamentablemente estamos ante una economía de consumo, en donde los jóvenes que no tienen acceso a la educación solamente piensan en imitar el estilo de vida que se lleva en los Estados Unidos de América.
Por el lado de los políticos es mínimo lo que esperamos en ese mundo de canibalismo invadido por la corrupción, nepotismo, impunidad y toda clase de actos reñidos con la ley.
De manera que toca al magisterio nacional insistir en la enseñanza sobre la importancia del Dr. Juan José Arévalo, hombre honesto, estudioso, escritor de libros y creador de numerosas obras educativas. Tratemos de ser un poco como el Dr. Arévalo y Guatemala saldrá adelante.
Estoy seguro que el ex presidente Arévalo vería con agrado la fundación de escuelas en todo el país y que no hubiese niños sin estudiar. La imagen que tengo de Arévalo es la de haber sido respetuoso de las ideas religiosas, del sindicalismo sano, de leyes bancarias protectoras del ahorro, de un Congreso Legislativo con pocos diputados y salarios justos, -no como los salarios actuales de los diputados que son una ofensa a la pobreza del pueblo-. El deporte que impulsó fue la construcción de la Ciudad Olímpica, sin corrupción.
Ser arevalista fue un honor, se convirtió en la cruzada por la dignidad. No ha existido otro presidente como él, salvo los casos del Dr. Mariano Gálvez y de Jacobo Arbenz Guzmán, con quienes sí hubo bases para la formación de Guatemala.
Obtengamos ejemplos incluso de las dictaduras, tal el caso de don Jorge Ubico quien prohibió terminantemente tomar licor en horas de trabajo. Esta adicción destruye al país, y tristemente enriquece a muchos al vender el espantoso aguardiente.
Cada día surgen noticias que en nada forman una patria, por el contrario, erosionan lo poco que hemos ganado, por ejemplo, tres diputados que redactaron maliciosamente una invitación para visitar Francia y conocer ese país. La justicia de Guatemala los absolvió por falta de pruebas, fomentando con ello la impunidad y corrupción total. Ni un artículo instructivo dejaron los diputados viajeros y eso que de Francia podemos aprender mucho. ¿Qué podemos esperar de tan funestos personajes? Ni siquiera devolvieron el valor de los boletos de avión.
Quisiera que desaparecieran las diferencias sociales, ni ricos ni pobres, moriré sin ver esa luminosa esperanza. Sin embargo intento organizar el pensamiento de quienes me leen. Estoy meditando que los candidatos actuales de izquierda debieran organizar a las personas de sus barrios y no participar en elecciones de corruptos.
Insistir en la enseñanza de la historia es algo instructivo y de gran ayuda en la formación del pueblo. Guatemala tiene movilizaciones populares, lucha de maestros, obreros y militares dignos, -oficiales jóvenes-, que derrocaron a Ubico y a Federico Ponce Vaides quien gobernó durante 108 días. Las terribles escenas de represión en contra de líderes obreros durante el gobierno presidido por Fernando Romeo Lucas García, son aspectos para leerlos con atención y obtener nuestras propias conclusiones.