La fiesta de los Oscar se prepara como siempre


Los Premios Oscar, aunque no son los más prestigiosos del cine, sí­ son los más codiciados por los cineastas, ya que este galardón incrementa las ventas en taquilla.

La fiesta de los Oscar se prepara como todos los años y con la confianza de sus organizadores de que alcanzarán un acuerdo con los guionistas, gremio que desde el 5 de noviembre cumple una huelga que ya derribó la ceremonia de los Globos de Oro.


Los Globos de Oro fueron ví­ctima del conflicto entre patrones y guionistas de Hollywood. ¿Correrán los Oscar la misma suerte?

«En esta fase seguimos haciendo nuestro plan tal cual lo establecido», dijo Bruce Davis, director ejecutivo de la Academia de las Ciencias y las Artes Cinematográficas quien en nombre de la organización expresó su optimismo frente a un acuerdo con los guionistas que permita realizar la ceremonia el próximo 24 de febrero en el teatro Kodak de Hollywood.

Pero en momentos en que prevalece la incertidumbre frente al conflicto que enfrentan el Sindicato de Guionistas (WGA) y las principales productoras hollywoodenses es difí­cil prever si la disputa se resolverá antes de un show agendado para dentro de un mes y medio.

La huelga de los guionistas se cobró su ví­ctima de más alto perfil el lunes, cuando la Asociación de la Prensa Extranjera en Hollywood (HFPA) anunció la suspensión de la tradicional cena de gala de los Globos de Oro del próximo domingo y en su lugar realizará una conferencia que transmitirá el noticiero de la cadena NBC, que detenta los derechos de este galardón.

La decisión se produjo luego que el Sindicato de Actores Estadounidenses (SAG), anunciara el viernes que las estrellas no cruzarí­an los piquetes programados en las puertas del hotel Beverly Hilton por el Sindicato de Guionistas (WGA).

La WGA ya anunció que no permitirá a sus miembros escribir los guiones para el espectáculo de los Oscar, previsto para el 24 de febrero, pero aún no han confirmado explí­citamente si realizarán piquetes a las puertas de la ceremonia en el Teatro Kodak empañando el evento que es transmitido por la cadena ABC, una de las corporaciones en disputa con los guionistas.

Davis dijo que aunque los Oscar podrí­an sobrevivir a la falta de guionistas, sí­ supondrí­an un dolor de cabeza eventuales piquetes que lleven a los actores a manifestarse idénticamente a como lo hicieron para los Globos de Oro: no ir en señal de apoyo a los guionistas.

«Yo creo que podrí­amos absorber la falta de guionistas si ellos no fijan piquetes», dijo Davis, pero admitió que «los piquetes son un gran problema».

El responsable de la Academia indicó que los organizadores tendrán la orden de esperar hasta pocos dí­as antes de la ceremonia para afinar detalles del evento tal como sucedió en 2003, cuando la entrega de los Oscar se realizó dí­as después del inicio de la guerra de Estados Unidos contra Irak.

Para Tom O»Neill, experto en premiaciones de Hollywood, si la WGA decide fijar piquetes de huelga en los Oscar, la pelota caerí­a nuevamente en el campo del sindicato de actores (SAG).

«Será muy interesante ver lo que harán los actores si hay piquetes en los Oscar», afirmó O»Neil, columnista del diario Los Angeles Times.

«Serí­a hipócrita de su parte (los actores) cruzar los piquetes de los Oscar cuando decidieron no hacerlo para los Globos de Oro», agregó.

Por su parte, la AMPTP afirmó que la decisión de la WGA se asemejaba a los boicots de los Juegos Olí­mpicos entre estadounidenses y soviéticos en los años 1980 y 1984, en plena Guerra Frí­a.

«Imagí­nese que usted ha trabajado duro toda su carrera en el negocio del entretenimiento y tiene una oportunidad en la vida para ser nominado a los Oscar o Globos de Oro», dijo en un comunicado la AMPTP añadiendo la metáfora de que con tales acciones se dañaba «a los atletas» más que a las empresas.

No obstante, Davis dijo que le resultaba complicado adivinar las intenciones de los guionistas de cara a los Oscar.

«Somos una organización diferente a los Globos de Oro. La mayorí­a de nuestros miembros son de diferentes sindicatos profesionales (del cine) y les encanta estar bajo los reflectores una noche al año, incluso a los guionistas», dijo Davis.

«Pero no sé si eso va influir. Ellos no están contra nosotros sino contra la cadena de televisión que nos transmite», concluyó.