Sería interesante saber cuáles son los datos estadísticos y económicos que el ministro Sergio de la Torre, exmiembro de la Junta Directiva de CACIF y de la Cámara de Industria ha utilizado en sus numerosos viajes al exterior «dizque» promoviendo la inversión o el interés de invertir en Guatemala, datos que él no puede dejar de tener a su disposición, especialmente si es el Presidente del Instituto Nacional de Estadística o será que el ministro De la Torre considera que la inversión internacional y nacional no requiere conocer cuántos son los habitantes del país, así como por departamento.

Pensará que quienes le escuchan son tan simples en su preparación, que no necesitan saber los posibles consumidores nacionales, la infraestructura, los costos de producción y tantos otros datos que hacen factible pensar o no en venir a Guatemala y crear una pequeña, mediana o gran industria que abastezca el mercado nacional, centroamericano y de alguna forma internacional con “X o Y” producto.

Qué razonamientos dará él y los seudofuncionarios que se han gastado millones de millones de dólares en lo que ellos llaman el Programa de Competitividad si, a estas alturas, después de más de diez años no han pensado en la necesidad urgente de un nuevo censo de población y habitación, el cual no se puede realizar en un día, en un mes, requiere por lo menos un año, lo que implica que en el mejor de los casos el mismo estaría realizándose en el año 2014; es decir, un año antes que termine el mandato del gobierno que preside Otto Pérez Molina y Roxana Baldetti, como vicepresidenta.

Por experiencia, sé que son numerosos los esfuerzos y los contactos nacionales e internacionales lo que se tienen que realizar para efectuar esta gorda obligación de realizar como mínimo un censo de población y habitación cada diez años, los cuales ya transcurrieron.

En cuanto a los partidos políticos representados en el Congreso, todos sin excepción saben la importancia y trascendencia que se realice un nuevo censo, es en base a estos datos que se debe convocar a las próximas elecciones por el Tribunal Supremo Electoral. Es también en base a datos actualizados que se debe programar la inversión pública, de lo contrario estamos actuando a ciegas y por eso es que las escuelas primarias y de educación secundaria no se construyen, no se equipan adecuadamente en los municipios para cubrir la fundamental necesidad que tenemos todos los guatemaltecos de educación primaria y secundaria. Costa Rica nos continúa aventajando y al paso que vamos lo harán el resto de países de América Central, para qué compararnos con Suramérica.

Esos mismos criterios corresponden a salud, a infraestructura, a recursos que deben asignarse a cada municipalidad por parte del gobierno central. El Occidente del país es un área súper poblada, donde la pobreza y la extrema pobreza predominan y la única manera de erradicarla es con inversión, la cual para poder asignar de forma prudencial y técnica debe de contar con la estadística correspondiente.

Si alguna razón es válida para interpelar al ministro Sergio de la Torre es su falta de planificación pasada, presente y futura, la cual es comprensible porque de guatemalteco tiene muy poco, incluso es muy probable que hasta tenga pasaporte español o como mínimo todos los papeles para invocar esa nacionalidad y largarse después de hacer o no hacer lo que como funcionario público es su obligación. El ejemplo ya lo dio el exdirectivo de la Cámara de Industria y también exministro de Gobernación, Carlos Vielmann.

¡Guatemala es primero!